El mensaje de Horacio Duarte Olivares, Secretario General de Gobierno, no pasó desapercibido: redoblar esfuerzos para estar más cerca de la gente y abandonar las inercias burocráticas que tanto daño hicieron en el pasado. “Más territorio y menos escritorio” no es una frase de coyuntura, es la línea que hoy define el estilo de gobierno en el Estado de México bajo la conducción de la Maestra Delfina Gómez Álvarez.
Recientemente, en Toluca, Duarte reunió a su estructura y recordó que El Poder de Servir es más que un lema. Es, en sus palabras, “una máxima moral que obliga a no perder tiempo ni rumbo, a caminar calles, tocar puertas y atender de frente las demandas ciudadanas”. Y lanzó una advertencia: quien no esté dispuesto a escuchar y resolver, no tiene cabida en este gobierno.
El gesto no es menor. Se trata de la primera señal firme desde la Secretaría General de Gobierno para dejar atrás la vieja política de escritorio y pasar a la cercanía real con la ciudadanía. No es casual que el recordatorio venga acompañado de un ejemplo palpable: las Caravanas Itinerantes por la Justicia Social, programa prioritario de la administración, que ya recorrió 122 municipios, otorgó más de 409 mil trámites y generó un ahorro superior a 126 millones de pesos a las familias mexiquenses.
En un momento de suma importancia, Duarte refuerza así el sello de este gobierno: la proximidad con el pueblo y la eficiencia en la gestión. Una manera de ejercer el servicio público que sigue la línea de la Presidenta Claudia Sheinbaum y de la Gobernadora Delfina Gómez, quienes demuestran con hechos que el poder solo se convierte en virtud cuando está al servicio de los demás.
