Cuando parecía que el futuro político de la abanderada de Morena a la Presidencia de México, Claudia Sheinbaum estaba ya decidido tras la “derrota” de su mejor hombre al gobierno de la Ciudad de México, Omar Garcia Harfuch, recibió un apoyo definitorio que la hizo volver a la contienda de junio del 2024.
Pedro Haces Barba, senador de la República, líder de la CATEM y amigo personal de la abanderada morenista, -así lo ha presentado de manera pública- demostró el músculo y de lo que es capaz de realizar con su Central Autónoma de Trabajadores y Empleados de México.
Y solo con una pequeña parte de esa institución, fue capaz de abarrotar la ya afamada Arena Ciudad de México que tiene un aforo de más de 30 mil personas, que dejó constancia del gran apoyo a la candidata a la Primera Magistratura de la Nación.
En ningún momento los miles de asistentes a ese centro de eventos y espectáculos, dejaron de animar y corear el nombre de la Sheinbaum, que se veía emocionada y vuelta a la vida, luego del desaguisado que su propio partido le infligió el pasado fin de semana, cuando García Harfuch quedó fuera de la elección pese a haber ganado 2 a 1 en las encuestas a Clara Brugada.
Hasta Mario Delgado, dirigente de Morena quedó perplejo de ver el aforo hasta la bandera, luego de los dos traspiés que con su aval le propinó a Claudia, quizá para descarrilarle el tren que parecía no se se detendría porque llevaba ya la bendición papal de su mentor.
De su parte, Clara Brugada, la hoy aspirante por dedazo a la jefatura del gobierno de la capital del país, dicen sus corifeos que no podía creer que tras casi la derrota que le causaron ella y sus incondicionales esbirros el viernes pasado y el vacío del Estadio Azul, hace 6 semanas, Sheinbaum se levantó de la lona.
Así, sin duda, la próxima candidata al Ejecutivo federal, encarriló de nueva cuenta su aspiración para buscar con el apoyo de personajes como Pedro Haces Barba, imponerse a sus detractores que aún creen la pueden bajar de la posición para la que fue electa.
No es difícil ser adivino para que a partir del evento de Catem, el propio Haces Barba se convierta en el caballito de Troya de la otrora jefa de gobierno de la Ciudad de México y lograr primero, el triunfo en su partido y luego, la elección presidencial del primer domingo de junio del 2024.
Ese tanque de oxígeno que absorbió la propia Sheinbaum, será decisivo para que al final del camino logre el reconocimiento de propios y extraños quienes aún no definen al interior de Morena, cuáles son sus bases y sus objetivos para apoyar sin ninguna concesión graciosa a cambio, a la designada por López Obrador.
Una cosa si es segura: los enemigos de la abanderada mordieron el polvo con el evento de referencia. Qué mejor prueba de que Sheinbaum ha sido vilipendiada y por el llamado fuego amigo al interior de Morena, que quiérase o no, es un partido político que ha hecho propias las prácticas ilegales que por largas décadas impuso el ya casi extinguido Revolucionario Institucional.
Los tiempos cambiaron para beneficio de Claudia, que hoy le debe su recuperación política a uno de los precursores de los trabajos del Tren Maya, sin duda, la obra insignia de la presente administración y que no obstante sus detractores, fue concluida y cuya inauguración está prevista para el próximo 15 de diciembre.