Negocios

La hipótesis TACO y la volatilidad reprimida

La segunda guerra comercial que Donald Trump está librando contra el mundo ha sido, por un amplio margen, mucho más ruidosa, grande y profunda que la librada durante su primer mandato. Se ha caracterizado por amenazas grandilocuentes, embates frontales contra aliados y rivales, y cuestionamientos profundos sobre cómo es que ha funcionado el mundo en las últimas décadas. Sin embargo, también se ha caracterizado por retiradas de último momento, concesiones inesperadas y cantos de victoria que parecen más una capitulación que un verdadero triunfo.

Esta última característica del conflicto ha sido la causante de la invención del acrónimo TACO, que por sus siglas en inglés significa “Trump siempre se echa para atrás” (Trump Always Chickens Out). Al principio de las hostilidades contra el mundo el mercado se ponía muy nervioso con los planes de Trump; sin embargo, conforme llegaban las fechas límite para aplicar dichas amenazas y Trump las aplazaba o las ignoraba, el mercado comenzó a volverse inmune a ellas: Trump no cumple ni los plazos ni sus amenazas, y el mercado empezó a funcionar bajo esa hipótesis.

Sin embargo, operar así es una realidad bastante frágil. Basta que un día Trump jale el gatillo y cumpla una de sus amenazas para echar por tierra la hipótesis con la que ha estado trabajando el mercado los últimos meses, y eso puede detonar mucha de la volatilidad reprimida que se ha ido acumulando en todo este tiempo. Un ejemplo de esto es el arancel de 30 por ciento anunciado a mediados de mes para México, que entrará, supuestamente, en vigor el 1 de agosto.

El escenario base con el que está operando el mercado es que “algo pasará”, y que los aranceles no terminarán aplicándose. Incluso, la misma presidenta Claudia Sheinbaum alimenta esta narrativa diciendo que se está trabajando directamente con el equipo estadunidense para evitar que la imposición de tales aranceles no lleguen a buen término y que, además, es optimista al respecto. ¿Pero qué pasaría si la “hipótesis TACO” se cae y Trump termina aplicando los aranceles prometidos? ¿Reaccionará el mercado? ¿De qué tamaño podríamos esperar dicha reacción?

En párrafos anteriores hablaba de “volatilidad reprimida”, el cual es un concepto clave para entender de qué tamaño puede ser la reacción del mercado si la hipótesis TACO resulta falsa. La volatilidad reprimida es un concepto usado en mercados financieros para describir una situación en la que la volatilidad real (o histórica) de un activo es inusualmente baja, pero se espera que aumente en el futuro por acumulación de riesgos no reconocidos por los participantes del mercado. Por lo general, es señal de que la tensión se está acumulando, como en una olla de presión, y que eventualmente explotará. Siguiendo el ejemplo de la olla, si se libera la presión poco a poco, la olla no explota y cumple su función sin problemas. Sin embargo, si no se libera la presión, la olla terminará estallando de manera violenta. La volatilidad reprimida es algo similar.

Por lo regular viene asociada a factores externos como la intervención de bancos centrales (la devaluación del peso en 1994 es un claro ejemplo de esto), control del mercado por parte del gobierno o una baja liquidez. Sin embargo, en este caso, la volatilidad reprimida viene de las expectativas unificadas de los participantes del mercado: una negación generalizada de que Trump no jalará el gatillo y las cosas regresarán a la “normalidad” más pronto que tarde. Como decía antes, estamos en una situación bastante frágil.

Regresemos al caso mexicano. Moody’s afirma que, de concretarse los aranceles anunciados para México, puede costarle 1 por ciento de crecimiento adicional al país en el corto plazo, y 0.9 por ciento de crecimiento a Estados Unidos. ¡Eso definitivamente no está reflejado en los precios actuales! Tanto la bolsa mexicana, como el tipo de cambio y las tasas se moverán fuertemente de su nivel actual para ajustarse a esta nueva realidad, y hay espacio para que lo hagan y lo hagan de manera rápida. El caso de las acciones estadunidenses es similar. A principios de abril (alrededor del Día de la Liberación), la volatilidad implícita del S&P 500 llegó a estar en 50 por ciento, cuando el promedio histórico es de 20. Actualmente se encuentra en 16 por ciento. ¡El mercado está siendo muy complaciente y la volatilidad reprimida podría destaparse y regresar a mordernos a todos!

Si bien el escenario base de que Trump no aplicará los aranceles anunciados puede ser sensato, debe ser un escenario al que hay que tomar con bastante cautela. En ese sentido, no hay que olvidar que existen otros escenarios donde las cosas no necesariamente se resuelven como la mayoría espera, y que ignorarlos solo nos da una visión sesgada de la realidad. Dicho esto, el mercado parece estar totalmente invertido en la idea de que todo regresará a la normalidad, sin escenarios alternativos ni medias tintas, cuando en realidad todo podría pasar. El mercado debería estar un poco más nervioso y empezar a descontar estas realidades alternas. ¡Es justo esa falta de nerviosismo lo que me empieza a asustar!


Google news logo
Síguenos en
Luis Gonzalí
  • Luis Gonzalí
  • [email protected]
  • CFA, Gestor del Fondo, VP y Co Director de Inversiones en Franklin Templeton México.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.