En la vida hay dos clases de personas, las que se levantan desesperadamente desde tempranito para hacer el ridículo como Lord Montajes Loret, Raymundo Rivapayacho o mi Kike Krauze, y quienes estamos buscando a alguna alma caritativa que nos preste su búnker antinuclear ahora que Trump quiere cumplirle a Netanyahu su sueño dorado de detonar la Tercera Guerra Mundial.
Como Loret al fin se dio cuenta que sus montajes ni cuajan ni insiden, recurrió a Brozo, el Trujillo ultraderechoso, para que produjera otro sketche con los materiales del humorismo PANdo. Los guionistas deben ser Kinky Téllez, Anayita y Jojojorge Robero de Terrenos, porque fue una pieza enchina de rencor contra Guadalupe Taddei del INE, porque no es complaciente con el PRIAN como mi Tatankita Lorenzo Córdova, el seudo demócrata sin atributos. Por supuesto, esta es una dictadura (digo, para dictaduras la trumpista, que lanzó un ataque contra Irán sin pedir la venia del Congreso), donde lo que busca Trujillo es dar show para la tribuna de patitas de molcajete.
Y por si eso fuera poco, ahora los de maquillaje lo dejaron no como la Taddei sino como Beatriz Pagés. Al rato cuando quiera meterse con Citlalli Hernández me van a dejar a brozito muy parecido a Alazraki, aunque ideológicamente se parecen tanto entre sí, que no pueden engañarnos.
Lo del calderonista Rivapayacho es un poquito más patético porque, al ritmo de su mítica y mística frase (“La verdad es irrelevante”) pretende explicar en algo muy remotamente parecido al español que AMLO es el peor presidente de la historia (no se rían), con los mismos argumentos guangos del #SacoDePus y de todos los paleros de Alazraki en conjunto. Una auténtica rudeza innecesaria contra Fox, Salinas, Zedillo, Calderón que le echaron muchas ganitas para saquear a la patria.
Lo de Kike Krauze podría ser muy aburrido porque cada semana desde el 2018 afirma que ya se acabó la democracia y que la república está destruida. Sin embargo en esta ocasión, con una pequeña ayuda de Loret Lord Montajes armaron un melodramón que sería la envidia de Marga López, Sara García, Libertad Lamarque y Victoria Ruffo. Hay que reconocer que su versión yunquísitica y voxista de Mentiras, el musical, es una maravilla.
Mientras pido un búnker antinuclear a domicilio porque el pacifista Netanyahu ya se quiere trepar en una bomba atómica como el Doctor Insólito, veo que la Loca Academia Derechueca de Miramones exige una invasión yanqui, poniendo cara de toro loco.