No se vale que justo cuando Alazraki y Alito Moreno querían ir a postrarse frente al Mirrey de España para pedirle de favorcito que mandara unas carabelas repletas de MAGAVOX para cargar con el comunismo mexicano, Felipe VI haya tenido el mal tino de exigir el fin de genocidio en Gaza. Los jodió.
Pero imagínense cómo se pusieron en la ultraderecha española —esa que se siente estética y moralmente superior como Milei— que daba por sentado que a don Felipe le faltaba un grado para ser franquista. Pero no; seguramente después de que lo bañaron en críticas y de lodo después de haberse ido a tomar la foto con las víctimas de las inundaciones en Valencia, el otrora Príncipe de Asturias quiso deslindarse de los fachos de Fachilandia. Imagínense cómo le hubiera ido si sale como Felipe González (el presidente de la transición, líder del PSOE, diciendo que todo se arreglaba si Hamas entregaba a los rehenes, cuando Israel tiene 13 mil palestinos sin sentencia en sus cárceles) o como Chema Aznar (el que trae a Caldedrunk como su valet) al asegurar prácticamente que el genocidio en Gaza es un mito genial. Que le queman la corona.
Aznar (el jefe de Calderón), Feijóo y Abascal deben estar cagaos ante la declaración de su rey. Sobre todo ahora que se sentían muy empoderaditos y trumpistas manejando grupos de choque bien MAGA y amenazando a todos los que difieren de sus ideas arcaicas, fachas, franquistas y nostálgicas de la dictadura. Su arrogancia fachistoide encontró su nivel más fascineroso cuando un diputeibol de VOX le dijo al director de Radio Televisión Española que no sabían si, cuando tomaran el poder, iban a entrar con metralletas o con lanzallamas. Muy comedido, José Pablo Sánchez respondió que la institución no estaba para consecuentar sus machismos, misoginias, ni su gusto por la censura y los genocidios. Y es que a los franquistas se les había atragantado un monólogo del Jimmy Kimmel ibérico, Marc Giró, donde se burlaba de los machines que se sentían perseguidos por las mujeres feministas y malvadas que los denuncian falsamente por violencia de género, cuando estas denuncias falsas apenas alcanzan el 00.00000084%
Ya lo único que les falta a los derechairos hispanos es hacerle un homenaje televisivo cutre, rancio y morboso a Primo de Rivera y al falangismo, como el que el que le hicieron aquí a un Porfirio Díaz todo guango, que parece un Loret ruco. No tardan en rendirle culto a Díaz Ordaz, la maestra Gordillo y a Salinas de Gortari.
#NoMaMarx.
