En un escenario ideal, sería maravilloso que pudiéramos dedicar 100 días de nuestras vidas para pensar y poner en marcha estrategias de construcción de paz.
En la práctica, si podemos darnos un día de vez en cuando o siquiera dedicar un momento de nuestra jornada ordinaria para tal objetivo es casi un privilegio.
Al mismo tiempo, en el escenario global actual los conflictos, el aumento de las desigualdades, la persistencia de las injusticias, la guerra de la humanidad contra la naturaleza y un sistema financiero mundial anticuado, disfuncional e injusto obstruyen el camino hacia la paz.
En este escenario es fácil que surjan actitudes pesimistas y fatalistas.
Aceptando sin conceder, es decir, si asumimos una perspectiva en la que consideramos que todo está perdido, incluso en esa postura cabe la pregunta, ¿de qué lado quieres estar?
Del lado de quienes realizan acciones que fomentan las problemáticas antes mencionadas o prefieres organizarte junto con otras personas para construir un mundo más inclusivo, sostenible y pacífico para todos.
Los problemas son complejos y exigen soluciones en igual proporción.
Por eso es fundamental que las acciones individuales se orienten a sumar a los objetivos de organizaciones colectivas.
Por estas razones, Antonio Gutiérrez, Secretario General de la ONU, convocó a preparar el próximo Día Internacional de la Paz, a conmemorarse el 21 de septiembre, con una cuenta atrás de 100 días previos de reflexión y acciones.
Este año, el Día Internacional de la Paz se centrará en el tema “Acciones por la Paz” y en cómo los Objetivos de Desarrollo Sostenible son esenciales para prevenir los conflictos, para solucionarlos por vías pacíficas y para mantener la paz.
Informaremos puntualmente de las actividades que organizaremos en el marco de los 100 días por la paz.
@perezyortiz