José Emilio Pacheco Berny es considerado uno de los escritores más destacados de habla hispana del siglo XX; se cultivó en todos los géneros literarios. Las batallas en el desierto, narrada en primera persona, cuenta la historia de Carlitos, quien comienza a experimentar los deseos y emociones que acompañan a los inicios de la adolescencia, como el primer amor. En este caso, un amor incomprendido, imposible, pero intenso y completamente verdadero a la mirada de Carlitos, quien se enamora a primera vista de Mariana, la mamá de su mejor amigo Jim.
La novela es contada por Carlos a sus 60 y tantos años, nos recuerda con nostalgia cómo era la Ciudad de México en los 40s y 50s del siglo pasado. Las batallas en el desierto es también una crítica al sexenio de Miguel Alemán, a la corrupción y cinismo de la clase política, a las diferencias en las clases sociales, a la falsa moralidad de la iglesia, a la triste situación del país que comenzaba a ser absorbido por Estados Unidos. Era un México en transformación donde la élite política se aprovecha de los cambios sociales, dejando de lado las necesidades de la población y perpetuando la desigualdad.
La corrupción en México, desde la época de Miguel Alemán, es un problema sistémico que sigue afectando a todos los niveles de gobierno, el sector privado y la sociedad en general, y que se sigue manifestando en diversas formas, desde el soborno hasta el desvío de fondos públicos. La prueba más tangible son las casas en el extranjero de la actual clase política y que, cínicamente, no les importa el hedor que nace de este hecho. El cinismo es manifiesto e insultante.
Las batallas en el desierto nos muestra cómo el poder se utiliza para el beneficio personal y se perpetúa la desigualdad social, generando un clima de desilusión que sigue en la actualidad permeando a nuestra realidad, pero ahora se justifica y acepta por el color del partido que se encuentra en el poder. Al final, José Emilio Pacheco nos recuerda que el amor es una enfermedad en un mundo en que lo único natural es el odio