Sin la necesidad de la llegada de la nueva Legislatura en septiembre, los actuales diputados en Hidalgo ya iniciaron el plan C para el gobernador Julio Menchaca.
El primer paso se dio con la modificación de la Ley Orgánica del Poder Legislativo en donde se reformó el periodo para ostentar la Junta de Gobierno, o mejor dicho, para que regrese la presidencia de la Cámara de Diputados estatal a la fuerza política de mayoría, al menos para la siguiente Legislatura y por los tres años siguientes.
Esto representa lo que originalmente se buscó con los triunfos de Morena desde hace dos legislaturas en donde, en manos del Grupo Universidad, jamás se pudo competir en contra de los designios priistas del gobierno estatal de Omar Fayad y compañía.
Ahora, parece que la cuarta transformación comienza una nueva etapa política desde el Legislativo, en donde las reformas del gobernador Julio Menchaca podrán ser discutidas, analizadas y aprobadas por la mayoría calificada con al que contará Morena a partir de septiembre y además con el aval de la Junta de Gobierno en donde se espera que sea designado un coordinador parlamentario cercano al primer círculo hidalguense.
¿Cuál es el beneficio para los ciudadanos del estado?, que las propuestas que están atoradas en comisiones y que no han sido aprobadas puedan pasar para mejorar las normativas vigentes como lo son la Ley de Imagen Urbana, la Ley de Extinción de Dominio, la Ley de la Familia, el uso del lenguaje incluyente, garantizar que las actuaciones legislativas cuenten con enfoque de perspectiva de género y derechos humanos, entre otros cambios de fondo.
Otro aspecto de gran calado es que las asignaciones presupuestales podrán estar, ahora sí, emparejadas con el plan de gobierno del Poder Ejecutivo, que siempre fue el dolor de cabeza de los anteriores gobiernos y que ahora se podrán dar los recursos necesarios para los programas sociales, aplicar los planes de austeridad, las revisiones a los municipios, mayor control gubernamental y sobre todo, una transparencia efectiva que no se quede solamente en el papel.