De acuerdo con algunos floricultores de la región de Atlixco, las constantes lluvias, y la intensidad de las precipitaciones, mantienen en riesgo el cultivo de cempasúchil en México, debido a que en nuestra entidad se concentra el 80 por ciento de la producción.
El pasado viernes, Multimedios Puebla dio a conocer la opinión de algunos agricultores, preocupados por los fenómenos meteorológicos que se han registrado en las últimas semanas.
Las lluvias y granizadas han ocasionado ya algunos problemas en las siembras, pues el ciclo agrícola comprende desde el mes de abril hasta julio, y para estas fechas ya están por levantar la cosecha. De continuar la misma tendencia hídrica podrían sufrir pérdidas millonarias, pero además resultaría afectada una de nuestras tradiciones más importantes.
La producción de la flor se concentra principalmente en los estados de Puebla, Morelos, Hidalgo, Guerrero, Estado de México y Ciudad de México, justo donde la reciente temporada de lluvias ha hecho mayores estragos.
La entidad poblana suele ser la principal productora, aportando hasta un 80% del total nacional, que además tiene usos industriales y medicinales.
Puebla cuenta con una superficie sembrada de mil 557 hectáreas, seguido de Tlaxcala con 118, mientras Hidalgo y San Luis con 111 y 79 respectivamente.
Pero no solamente está en peligro la llamada flor de muerto, sino la producción de la nochebuena, que está en etapa previa porque en unos tres meses o antes tendremos a la venta las distintas variedades.
Si a las amenazas naturales agregamos las externas como la flor traída de china, estamos hablando de una verdadera tragedia para nuestros productores, pero también para nuestras tradiciones.
El gobierno federal y estatal deberían estar preparados, y confío en que así será, para apoyar a los floricultores locales que luchan contra las inclemencias del tiempo y la globalización.
