“Los límites de mi lenguaje, son los límites de mi mundo.”, solía decir el filósofo, matemático y lingüista austriaco Ludwig Wittgenstein, en alusión a que la forma en que nos comunicamos, sea ésta escrita, oral, gestual, u otra, determina nuestra capacidad no sólo de interactuar con nuestros semejantes, sino también de comprender la realidad y el mundo en el que vivimos.
Fue así que dicho aforismo de ese pensador filólogo recién vino a mi mente, en ocasión de ver la mirada perpleja del joven banquero, al leer mi solicitud de reembolso por varios cargos para mí improcedentes, en una columna a cuyo total le añadí la abreviatura que precede estas líneas.
“Salvo error u omisión” (s.e.u.o.), era hasta hace poco una forma con la qué, de manera amplia y cautelosa se advertía sobre la posibilidad de que por una falla humana, fueran inexactas las cantidades señaladas en un documento, un formulismo que aunque legalmente intrascendente, revelaba una ausencia de dolo y la concesión implícita de escuchar una opinión diferente.
Pero en este nuevo mundo de premura generalizada, es entendible que dichas “fórmulas de cortesía contable” sean descartadas, en aras de una comunicación más breve y pragmática, con la que casi en un “lenguaje máquina”, se expresen las cantidades y el propósito del comunicado, o bien qué, el eficiente y casi perfecto funcionamiento de los programas de cálculo, hagan casi imposible los errores en el manejo digital de la información.
Pero me pregunto si este supeditarnos a la ultra-eficiencia tecnológica y a la maximización del rendimiento horas-hombre, donde el lenguaje se reduzca al mínimo necesario para comunicar sólo lo básico, ¿no redundará en detrimento dé, como sostenía Wittgenstein, un deterioro de nuestros límites de comprensión del mundo la vida y sus avatares?
Yo no lo sé de cierto, pero al menos en lo que toca a las redes sociales creo que dado el alto porcentaje de desaciertos y estupideces que ahí se afirman como verdades, no vendría mal que tamizaran sus aseveraciones con el cedazo de un “s.e.u.o.”. Dicho y escrito también esto S.E.U.O.
