Cultura

Buenos deseos

  • Vicio Impune
  • Buenos deseos
  • Antonio Nájera Irigoyen

A tres meses de la invasión rusa en Ucrania, leo el más reciente artículo de Anne Applebaum publicado en The Atlantic. Para quien conoce la trayectoria de Applebaum, no sorprende el argumento: la coalición occidental no debe entablar negociaciones con el gobierno de Putin y debe, por el contrario, perseguir su derrota o destitución a toda costa. Cualquier cesión, insiste, conduciría a futuras violaciones territoriales por parte de Rusia. Ayer fue Crimea y hoy es Ucrania: mañana será cualquier otro país del subcontinente.

Es posible que Applebaum tenga razón desde una perspectiva idealista; el problema, sin embargo, es que la invasión a Ucrania es todo menos una lucha por las ideas: es un típico caso de Realpolitik en el que un Estado poderoso se impone sobre uno más débil. Y, guste o no, el control de Rusia sobre el este de Ucrania es un hecho consumado: lo fue en Crimea en 2014; lo es hoy en el Donbás; y bien podría serlo en Kiev dentro de algunas semanas o meses.

A cuatro meses de la invasión —con muertes, lesionados y desplazados que se cuentan por millares—, resulta inverosímil el llamado de Applebaum, desde la ribera del Potomac, a continuar con la resistencia. (Escribiría llamado a la guerra total, pero tampoco es que la periodista conmine a ello. Llama únicamente a la trasferencia de armas y al endurecimiento de sanciones internacionales. O dicho en otras palabras: a nada). Anatemizar la anexión sin imposibilitar su realización en los hechos no es una política; declinar negociar por razones morales no es una estrategia pues, usualmente, se negocia con quien no se quiere. Y si hay que negociar con el diablo, los ucranianos habrán de hacerlo.

Peor aún: Applebaum apela a que la coalición occidental obligue a Putin y a los suyos a aprender de sus errores: a entender, por decirlo pronto, el costo de una invasión para la continuación de su régimen. De nueva cuenta estoy en desacuerdo con la autora, pero puedo comprender su tesis. Lo que no alcanzo a vislumbrar es por qué también insiste en que la ciudadanía rusa participe en este mea culpa. Mala costumbre mía, la de distinguir los asuntos morales de los mundanos y a los gobernantes de sus gobernados.

La posición de Applebaum representa, por desgracia, la de una buena porción del establishment estadounidense. Y mañana habrá editoriales sentimentales sobre combatir hasta el final, sobre Chamberlain y Hitler en Munich, y sobre la preeminencia de la democracia sobre el resto de los sistemas políticos en el mundo. Y habrá también, desde luego, más muertos.

Antonio Nájera Irigoyen


Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.