Hace tres años, en la elección anterior en Tlaquepaque, las autoridades electorales determinaron repetir la elección luego de las declaraciones hechas por el Cardenal emérito Juan Sandoval Iñiguez a través de sus redes sociales. En dicho audiovisual, invitaba a sus fieles católicos a no votar por Morena. Aunque no especificó a qué candidatos se refería, el hecho de que su domicilio esté en el municipio alfarero fue suficiente para que el entonces candidato a presidente municipal de Morena, Alberto Maldonado, utilizara estas declaraciones como prueba pericial para que se repitiera la elección en dicha localidad. Todos conocemos el resultado: en la elección extraordinaria volvió a ganar Citlalli Amaya del partido Movimiento Ciudadano.
Sin embargo, en el reciente proceso electoral, el religioso de 91 años compartió un nuevo video invitando a la comunidad católica a no votar por el comunismo. Estas declaraciones han sido utilizadas tanto por Citlalli Amaya, del partido naranja, como por Chema Martínez, del partido Morena en Guadalajara. Ambos perdieron la elección y ahora quieren utilizar como argucia jurídica las declaraciones de “Don Juan”, un adulto mayor que deberían dejar en paz por respeto a su edad y porque además, tiene 23 años sin dirigir la Arquidiócesis de Guadalajara.
Es importante señalar que ningún partido, en sus estatutos, promueve la instalación del comunismo. Aunque algunos se declaren de centro izquierda o izquierda, ambos institutos políticos buscan acceder al poder por la vía democrática. Las declaraciones del cardenal emérito son muy ambiguas y no deberían ser utilizadas en agravio de algún candidato perdedor. Es cierto que están en su derecho de utilizar todos los instrumentos jurídicos a su alcance, pero también demostrarían mucha madurez política al aceptar que la elección no les favoreció.
Sería sano que los actores políticos dejen de recurrir al clero para intentar anular elecciones. La democracia se fortalece con el respeto a la voluntad popular expresada en las urnas, no con manipulaciones legales basadas en declaraciones ambiguas de un religioso retirado.
