Este martes a las 17:00 horas se cerró el plazo de dos días, que de acuerdo con la convocatoria del Consejo Universitario de la BUAP, para el registro de aspirantes a la rectoría, que como en todas las casas de estudio genera movilizaciones, tanto presenciales como en las benditas redes sociales.
Mi compañera Elvia García, quien tiene asignada la fuente universitaria, publicó el lunes una amplia nota donde explica a detalle el proceso con el cual inicia la renovación. En ella dice que la convocatoria para el nombramiento de la persona titular de la rectoría de la BUAP para el periodo 2025-2029, será el 25 y 26 de agosto, plazo que se venció la tarde de ayer.
En ese tiempo la Comisión de Auscultación recibirá las opiniones individuales o colectivas de la comunidad universitaria sobre las cualidades que poseen los aspirantes. Según el último reporte hay nueve aspirantes de todos colores y sabores, de entre los que destacan la propia rectora, Lilia Cedillo, y Beatriz Gutiérrez Müller.
Algunos seguramente cumplen los requisitos y han hecho méritos para aspirar al cargo, pero no cuentan con el apoyo de maestros y alumnos en sus facultades para tener posibilidades reales.
Habrá otros, que pese a no tener ni los méritos ni el apoyo, quieran utilizar los métodos del pasado generando ruido o tratando de promover el caos, por lo que tampoco debe sorprendernos que salga información sobre expresiones en contra de los candidatos mejor posicionados.
Una vez que los 13 integrantes de la Comisión de Auscultación han recibido las opiniones durante estos dos días, mismas que podrán ser audiovisuales y/o escritas y consistirán en argumentos, fundados y motivados, sobre aspectos académicos, de antigüedad y calidad en la docencia.
Así como investigaciones realizadas, proyectos en los que participa, creaciones artísticas, apoyos que recibe, informes publicados, premios o reconocimientos, grado de aplicación de los resultados de la investigación, generación de nuevos conceptos, teorías, o prototipos.
Así que pierden su tiempo los grillos o los grupos que pretendan desestabilizar la institución, desacreditando a alguno de los aspirantes, porque lo que toman en cuenta los consejeros y quienes tienen derecho a decidir es el trabajo realizado durante años en favor de la BUAP.
Esta es una fiesta donde solo tienen derecho a participar los universitarios y por el bien de todos, las cosas deben desarrollarse “en santa paz y vale más”, como diría mi finado amigo Martín Treviño Sosa, que en gloria esté.
