Las ciudades medianas y grandes de México acusan un fuerte rezago en relación a su conectividad, calidad de vida, limpieza y orden. Si los alcaldes no tienen esta visión en sus planes a largo plazo, caerán en el activismo mediático.
Existen factores por los cuales hay que trabajar, para que se llegue a la meta deseada: tener una ciudad atractiva, digna de vivir en ella y de ser visitada.
Uno de ellos es el atraer y retener el capital humano para que este desarrolle planes para mejorar la educación, la creatividad y la investigación. El nivel educativo y el acceso a la cultura son componentes para la medición de ese capital .
La cohesión social es otro factor medible. Se refiere al grado de consenso de los miembros de una comunidad frente a su ciudad y el sentido de pertenencia que tengan de ella. Se mide en función de las interacciones dentro del grupo y de este frente a las instituciones públicas.
“La cohesión social en el contexto urbano hace referencia al grado de convivencia entre los grupos de personas con rentas, culturas, edades o profesiones diferentes que viven en una ciudad”. Implica la eficacia del sistema de salud y la seguridad e inclusión ciudadana.
El factor relacionado con la economía marcan el desarrollo económico de la ciudad: Planes de promoción económica local, planes de transición, planes industriales estratégicos y generación de clústers enfocados en impulsar la innovación, la tecnología y el emprendimiento. La sostenibilidad hacia el futuro, la calidad de vida de sus habitantes, el PIB real es una medida del poder económico de la ciudad y de los ingresos de sus habitantes.
La productividad laboral es una medida de la fortaleza, la competitividad, la eficiencia y el nivel tecnológico del sistema productivo.
La gestión pública busca medir las iniciativas de eficiencia de la administración pública, con énfasis en el diseño de nuevos planes de organización y gestión local. Además, evalúa como positivos los vínculos entre el sector público y el privado.
La gestión pública como un factor altamente correlacionada con el estado de las finanzas de una ciudad. En este sentido, las cuentas públicas inciden de manera decisiva en la calidad de vida de los habitantes y en la sostenibilidad de la urbe. Aquí la participación ciudadana y el talento de las autoridades locales para gestionar alianzas entre esas personas, las organizaciones y las entidades públicas son fundamentales, en especial para la aplicación de los planes de gobierno. _