El bajo nivel de almacenamiento que registra la presa Miguel Alemán, Laguna de Valle de Bravo, es producto de varios factores que de no atenderse por las autoridades de los tres ordenes de gobierno, este cuerpo de agua puede extinguirse en menos de diez años.
Son varios los fenómenos que han agudizado la crisis por la que atraviesa este embalse, vayamos por partes:
La poca recepción de agua que le llega de los manantiales, ríos, escurrideros y por las precipitaciones pluviales. No son suficientes para aumentar el almacenamiento que actualmente se encuentra por debajo de 40 por ciento de su capacidad total.
Las precipitaciones pluviales fueron generosas, de hecho todavía en las primeras semanas de octubre se registraron algunas con mucha intensidad, y eso abonó a que le llegará a la presa alrededor de 20 metros cúbicos por segundo. De Acuerdo con las mediciones que hizo la propia Conagua
Pero, es de analizar y de conocer cuáles son los principales afluentes del embalse y no son las lluvias, sino las fuentes hídricas naturales como los ríos Temascaltepec, Malacatepec y Tiloxtoc, así como los manantiales y los escurrideros, esos últimos provenientes de las zonas boscosas.
Y es aquí donde ha habido señalamientos de activistas y asociaciones civiles en pro del ambiente, que lamentan la tibieza con la que se actúa ante la crisis que se vive en este embalse desde hace 10 años y que no se actúa contra los que desvían los causes de manantiales, ríos y escurrideros para sus lagos artificiales privados.
A la laguna le llegan menos de 4 metros cúbicos por segundo, cuando recibía más de 10 metros hace 15 años. Ahora si bien va son 4 y le extraen 8 para atender el suministro de agua del sistema Cutzamala para la ciudad de México y zona metropolitana y Valle de Toluca.
Así no podrá resistor mucho, pues le extraen el doble de lo que capta, por eso la preocupación de los activistas, porque no sólo se acaba el agua.
Este es uno de los problemas, hay otro que se suma a la crisis que vive la presa. Es el de la contaminación de la que es objeto por parte de quienes han dispuesto de la laguna como el depósito final de sus desechos residuales o bien de los desperdicios orgánicos de los mataderos clandestinos que operan para el abasto de carne en la zona.
La laguna, no sólo está perdiendo belleza por la falta de agua, sino también por la contaminación que provocan quienes la utilizan como destino de desechos residuales y de desperdicios.
Aunado a lo anterior, desví0os de causes para lagos privados y contaminación, se suma la destrucción de zonas forestales que son fuentes hídricas, para dar paso a la construcción de zonas residenciales de descanso. Se han autorizado en los últimos diez años, más de cinco mil permisos de construcción de uso de suelo, sin tomar en cuenta losa que no dan aviso a la autoridad y construyen y construyen.
Vaya que es un asunto que merece atención, por lo que representa la laguna en todos los sentidos, económico, social y sobre todo de salud para el abasto de agua.
¿habrá intervención?