El monismo psicofísico es una teoría filosófica que sostiene que mente y cuerpo son dos aspectos de una misma realidad.
Esta teoría surge de la necesidad de encontrar una explicación coherente para la compleja relación entre la conciencia y el mundo material.
La idea central del monismo psicofísico es que la mente no es algo separado del cuerpo, sino que surge de la actividad fisiológica del cerebro, descartando los aspectos divinos fungiendo como precursores de nuestra capacidad de ser consientes.
Desde una perspectiva filosófica, esta corriente de pensamiento representa una postura naturalista y materialista, en la que se rechaza la existencia de cualquier entidad sobrenatural o metafísica que pueda interferir con la comprensión de la realidad.
El monismo psicofísico comparte una visión crítica de la religión y la metafísica, rechazando la idea de que hay algo más allá del mundo material, consecuentemente dando puerta a que la realidad puede ser entendida de manera completa y coherente a través del método científico y la investigación empírica, así dejando toda la responsabilidad de nuestras acciones en nosotros mismos, dejándonos sin la opción de abdicar de nuestros temores y quimeras refugiándonos en aspectos incomprensibles para nuestra especie.
El monismo psicofísico se enfoca en la comprensión de la relación entre mente y cuerpo propiciada por una visión materialista de la realidad, reconociendo también la importancia de la experiencia subjetiva y la conciencia, factores que desencadenan en las diferentes propiedades únicas que nos caracterizan como heterogéneos entre nuestra especie.
Esta corriente filosófica nos exhorta a explorar la naturaleza de la realidad y de la experiencia humana de una manera más profunda y reflexiva, donde lo único que está bajo nuestro control son la mente y el cuerpo de una forma acerva, donde nos enfrentamos a una única realidad compleja y fascinante, donde nuestra comprensión de nosotros mismos y del mundo siempre puede ser más profunda y matizada de lo que parece, donde únicamente tenemos como infalible aliado a nosotros mismos y nuestro potencial.