En esta semana que termina tuvimos de regalo un noticia que Don Menchaca nos dio, y es que para el presupuesto de egresos de este 2025 pedirá más lana, al parecer la intención es fortalecer mucho más la economía del Estado.
Nos adelantó que no será como deuda, sino como parte activa del dinero que se usará para estos lares; lector mío el presupuesto fue aceptado ya y lo que está pidiendo Julio es modificar lo aprobado, son casi 3 mil milloncitos más, insisto para según el incrementar el patrimonio de la entidad.
Dudo que las cuentas hayan estado mal desde un principio, pero si consideramos que de los 71 mil millones (leyó bien), que pidió para este 2025, resulta que el 45% es para el sector educativo, como que nos invade la maldita duda de cómo se le hizo para darle presupuesto a todo lo demás ¿No cree?
El presupuesto de egresos es un documento que detalla en qué y cuánto va a gastar el gobierno estatal en el año fiscal en curso, lo elabora el Ejecutivo y lo aprueba el Congreso Local.
Al final seguramente ese dinero si se lo darán y aquí la palabra del juego se llama honestidad, la cual es esencial para garantizar el desarrollo social y fortalecer la confianza de nosotros como gobernados. Este presupuesto determina cómo se distribuirá el dinero público como dije ya, primero para la educación, de ahí a salud, infraestructura, seguridad, obra pública, medio ambiente, turismo, etc.
Su uso honesto asegura servicios de calidad y elimina la corrupción, nuestro gobernador debe privilegiar la eficiencia del gasto y promover la cultura de legalidad, así que la honestidad no solo es un deber legal, sino un compromiso moral que impulsa el bienestar colectivo y fortalece la democracia hidalguense.
Por lo anterior es que estos temas no debemos dejarlos para trabajar juntos por una gestión transparente, responsable y justa.
Así que seguro estoy que esos 70 millones que costo el albergue de niños migrantes, si queremos, nos dirán peso por peso en qué se usó ¿O no?
