Política

El fin de “Norteamérica”

Escuchar audio
00:00 / 00:00
audio-waveform
volumen-full volumen-medium volumen-low volumen-mute
Escuchar audio
00:00 / 00:00

Antes de 1990, pocos creían que fuera posible un tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, un tratado de “Norteamérica”. Seamos honestos, antes de aquellos años en los dos países del norte no se consideraba a México como parte de “Norteamérica”.

En 1987, EU y Canadá habían firmado un acuerdo comercial (Cufta) que empezó a funcionar en 1989.

Carlos Salinas y George Bush comenzaron a hablar de por qué no hacer algo similar. Por una parte, para enfrentar lo que se venía desde Europa, arrancaba la Unión Europea, y, por la otra, para aprovechar las particulares características y potencialidades de cada país.

Eran tiempos de economía neoliberal. Años en que las ideas de Ronald Reagan (predecesor de Bush) y Margaret Thatcher, después del fin de la Unión Soviética, dominaban el mundo y apostaban a que el libre comercio era lo que haría crecer países y regiones.

En los primeros momentos de aquella negociación se dijo poco, pero Canadá no estaba totalmente convencido de integrar a México, después de todo ellos ya tenían su acuerdo. Al final, participaron y aportaron.

En Estados Unidos el Partido Demócrata fue la resistencia más difícil de romper, y la llegada de Bill Clinton antes del voto decisivo en el Capitolio obligó a unos acuerdos “paralelos” en lo laboral y en lo ambiental. Acuerdos que por “paralelos” nunca tuvieron mucho impacto. En noviembre de 1993, con apenas 34 votos de diferencia (234-200), la Cámara de Representantes de EU fue el último legislativo en aprobar Nafta.

No es este el espacio para hacer una evaluación de qué ha pasado en lo económico en estos 31 años. Cierto es que la relación comercial entre México y Canadá es importante para ambos países, pero mucho, mucho más pequeña que la que ambos países sostienen con el tercer socio y, en los dos casos, China se ha colado como un protagonista.

Y es cierto que para México el tratado se convirtió en el pilar del desarrollo y crecimiento en muchas regiones. En otras nunca llegó. También es cierto que muchas regiones estadunidenses fueron devastadas por la mudanza de empresas buscando mano de obra barata.

Desde la llegada de Trump, las “negociaciones” comerciales son siempre bilaterales. Ayer mismo la Presidenta anunció que manda a personajes clave de su gabinete para seguir negociando un acuerdo con la Casa Blanca. Los canadienses lo han hecho antes y solos.

En unos años sabremos qué trae a la región el fin de “Norteamérica”, que, eso sí, parece estar en agonía.


Google news logo
Síguenos en
Carlos Puig
  • Carlos Puig
  • [email protected]
  • Periodista. Notivox TV, Notivox Diario y digital, de lunes a viernes. Escucho asicomosuena.mx todo el tiempo.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.