Política

Imposible para el hombre

  • En Corto
  • Imposible para el hombre
  • Alejandro Maldonado

Es incuestionable que como humanidad hemos logrado avances científicos y tecnológicos impresionantes. Esta semana, la India se convirtió en el cuarto país en llegar a la Luna, y el primero en tocar su polo sur, a donde los expertos creen que podría haber importantes reservas de agua. En paralelo la Inteligencia Artificial sigue evolucionando e impactando casi toda forma de quehacer humano. Pero, en contraparte, hay un área vital que sigue deteriorándose en medio de los continuos éxitos: El corazón humano.

No hablamos aquí de ese órgano físico. La referencia es a nuestra condición interna, que no puede ser sanada con una IA, ni con religión, dinero, poder, fama, éxito, conocimiento o placeres. Sanar nuestro ser interior es imposible para el hombre, pero es posible para Dios.

Martín Lutero lo resumió de una manera clarísima al decir: “Cuando me miré a mí mismo, vi imposible salvarme; cuando vi a Jesús, vi imposible perderme”. Si somos honestos, reconoceremos que en nosotros no existe capacidad alguna para salir de nuestra miserable condición de pecadores perdidos, o de liberarnos de un sinfín de cosas que nos esclavizan. Si esto fuera posible para el hombre a través de alguna disciplina, tecnología o esfuerzo propio, Dios no habría enviado a su único hijo en nuestro rescate.

“La paga del pecado es muerte”, nos dice el apóstol Pablo en Romanos 6.23. Siendo que tú y yo somos pecadores, nuestro espíritu está muerto y desconectado de Dios. Esa es la razón por la que Dios no forma parte de nuestras prioridades, y de hecho en ocasiones hasta nos incomoda que se hable del tema.

¿Qué puede hacer un muerto para recuperarse? ¡Nada en lo absoluto! Solo la intervención divina hace un milagro, y eso ocurre cuando nos reconocemos perdidos y acudimos a Jesucristo para obtener de él el perdón y la salvación que él logró en favor nuestro con su sangre derramada en la cruz del Calvario: “Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo, por gracia son salvos”. Efesios 2.4-5.

Gracia divina a tu alcance. Inmerecida, gratuita, invaluable. Creé en Jesucristo. Pídele que venga a morar a tu corazón, te perdone, y transforme. Ven a él tal como estas. No te rechazará.


Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.