Han pasado tres meses desde que a don Simón Juárez Millán le robaron su camioneta en Silao, y desde entonces no deja de mirar con atención cada vehículo similar que se cruza en su camino.
Con la esperanza de recuperarla, revisa detalles como los rines o ciertas piezas que le recuerdan a su unidad, aunque en el fondo reconoce que las autoridades difícilmente harán su trabajo para localizarla.
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El robo ocurrió el 20 de mayo, mientras don Simón practicaba béisbol en el Estadio Municipal Manuel Chalanga Aguirre.
Su camioneta Nissan color guinda fue sustraída sin que nadie se diera cuenta.
Vecinos compartieron un video en el que se observa cómo el ladrón sube a la unidad con total naturalidad, como si fuera el dueño, sin despertar sospechas entre los colonos.
“Ya me vigilaban”
Don Simón relata que cada semana acudía a practicar béisbol y siempre dejaba la camioneta en el mismo sitio, por lo que sospecha que los delincuentes ya lo habían estado observando.
“Yo sospecho que ya me habían vigilado, porque siempre la dejaba en el mismo lugar. Como que ya la habían visto varias veces”, comenta resignado.
Aunque ya interpuso la denuncia correspondiente, reconoce que las posibilidades de recuperación son mínimas.
Asegura que, salvo que la policía detenga al conductor en un operativo de rutina, la camioneta podría seguir circulando sin problema alguno.
“Pueden andar con ella muy a gusto, porque si no cometen ninguna falta no la van a encontrar. No hay un trabajo de búsqueda especial, solo la encuentran de chiripada”, lamenta.
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Un caso más en la estadística
El caso de don Simón refleja lo que ocurre en gran parte del país. De acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), 6 de cada 10 vehículos robados en México no son recuperados.
En su caso, la denuncia quedó asentada en la Agencia Investigadora de Silao bajo el folio 108529, por el delito de “robo calificado de vehículo de motor”.
Desesperado por encontrarla, don Simón comparte en redes sociales las imágenes y características de su camioneta, una Nissan color guinda con placas FZ2299D, con la esperanza de que alguien pueda darle una pista sobre su paradero.
