A menos de un día del tiroteo registrado en el atrio del templo de la colonia Infonavit Malaquín, en San Miguel de Allende, uno de los jóvenes que había resultado lesionado falleció. Este ataque, ocurrido en medio de las fiestas patronales en honor a la Virgen de San Juan, dejó hasta el momento un saldo de tres personas muertas y 16 heridas.
Este martes, autoridades municipales confirmaron el deceso de Luis Ángel, menor de edad, quien, al igual que cientos de asistentes, disfrutaba de los antojitos, los juegos mecánicos y el baile sonidero de la festividad religiosa, que congregó aproximadamente a mil personas y fue irrumpida por este sangriento crimen.

Un día antes, el presidente municipal de San Miguel de Allende, Mauricio Trejo Pureco, condenó este acto atroz, en el que presuntos “sicarios” lesionaron a personas durante la celebración, atacando directamente a tres individuos previamente identificados.
Las víctimas mortales fueron José Luis 'N', alias ‘El Chato’, y Emmanuel 'N', alias 'El Mandi’. Otro de los objetivos, Oscar 'N', alias 'El Junior’, resultó lesionado. Testigos señalaron que los atacantes eran al menos dos personas vestidas con ropas militares, aunque las autoridades aún no han confirmado esta versión.
Tras disparar a sus objetivos, vecinos relataron que los agresores realizaron tiros para abrirse paso entre la multitud, que se encontraba aterrorizada. Algunos testigos mencionaron que, hasta llegar a la Avenida Colonial, observaron a un hombre realizando disparos al aire. Se estima que se escucharon alrededor de 30 detonaciones.
Oscar ‘N’, alias ‘El Junior’, permanecía hospitalizado hasta el lunes con lesiones que no ponían en riesgo su vida y también estaba bajo custodia de las autoridades.
Cientos de personas presenciaron el ataque y corrieron buscando refugio. Algunos se protegieron utilizando la infraestructura del Parque Skate “El Malaquín”, que incluye una pequeña área de juegos, el templo dedicado a la Virgen de San Juan, y canchas de fútbol y básquetbol. En la cancha de básquet, muchos se tiraron al suelo para protegerse, usando únicamente una banqueta de aproximadamente 70 centímetros como cobertura.