A inicios de 1985, cuando el narcotráfico en México comenzaba a sentar sus bases, ocurrió un violento crimen que encendió las alarmas del gobierno de Estados Unidos: el asesinato de Enrique 'Kiki' Camarena.
Si las autoridades estadunidenses no habían despegado la mirada de México a causa de las alianzas entre el Cártel de Guadalajara y organizaciones criminales con sede en Colombia, que permitía el tráfico de cocaína hacia el país de las barras y estrellas, el homicidio de Camarena únicamente intensificó los esfuerzos de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), misma que buscaba ponerle fin al grupo criminal mexicano.
Así fue como nació la denominada 'Operación Leyenda'. ¿De qué trató? En Notivox te explicamos.
El golpe más duro contra la DEA
Acorde con la propia agencia antidrogas estadunidense, "tal vez ningún acontecimiento tuvo un impacto más significativo" en la DEA que el secuestro y asesinato de Camarena.
"Su homicidio dio lugar a la investigación más exhaustiva jamás emprendida por la DEA, la cual terminó por revelar la corrupción y complicidad de numerosos funcionarios mexicanos", acusaron.
La 'Operación Leyenda' fue lanzada el 3 de mayo de 1985, a través de un equipo de investigación de la DEA responsable de coordinar e investigar el secuestro de Camarena y de Alfredo Zavala Avelar, piloto que colaboraba con el agente.
Derivada de esta acción, las autoridades estadunidenses lograron determinar que el 7 de febrero de 1985 cinco personas secuestraron a 'Kiki' Camarena y lo llevaron a una casa, ubicada en la calle Lope de Vega, Jardines del Bosque, en Guadalajara, Jalisco.

Finalmente, los agentes lograron obtener acusaciones formales contra varios individuos relacionados con el secuestro y asesinato.
"El arduo trabajo, las largas jornadas y el compromiso total de la agencia dieron resultados positivos", aseguran.
Aunque la operación estaba centrada en esclarecer el homicidio de Camarena, destaca que la DEA aprovechó la oportunidad para asegurarse de que el Cártel de Guadalajara no volviera a operar.
Estados Unidos reconoció que la 'Operación Leyenda' fue una investigación larga y compleja, dificultada por el hecho de que el crimen se cometió en territorio extranjero.
"Se necesitaron varios años para desarrollar los hechos, capturar a los responsables y finalmente llevarlos ante la justicia".

La investigación que arrebató la vida a Enrique 'Kiki' Camarena
Camarena Salazar nació en Mexicali, Baja California el 26 de julio de 1947. Durante su juventud se unió al Cuerpo de Marines de Estados Unidos y posteriormente se integró a la DEA en Calexico, California.
En 1981, Camarena fue asignado a la oficina de la DEA en Jalisco, con el objetivo de obtener información del Cártel de Guadalajara.
En su trabajo encubierto, logró infiltrarse en las operaciones criminales haciéndose pasar por agricultor. Gracias a su labor de inteligencia, la DEA obtuvo información crucial sobre uno de los mayores centros de producción de mariguana en México de aquel entonces: el Rancho Búfalo, una gigantesca plantación ubicada en el estado de Chihuahua perteneciente a Rafael Caro Quintero.
En noviembre de 1984, y como resultado de la información proporcionada por Camarena, las fuerzas federales mexicanas, con apoyo de la DEA, llevaron a cabo una redada masiva en la propiedad.

Sin embargo, este éxito tendría un alto costo. Meses después, el 7 de febrero de 1985, Camarena fue secuestrado y posteriormente asesinado, en lo que se interpretó como una represalia directa por la caída del Rancho Búfalo.
Durante todo febrero de 1985, la DEA continuó con los esfuerzos para localizar al agente Camarena. Se entrevistó a testigos, se siguieron múltiples pistas y se realizaron registros en varias viviendas.
Entonces, la DEA solicitó a la entonces Policía Judicial Federal Mexicana (PJFM) que considerara como sospechosos del secuestro a Caro Quintero,
Miguel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo.Días, más tarde, un trabajador agrícola encontró dos cuerpos en un terreno junto a una carretera transitada, a aproximadamente un kilómetro de un rancho en Michoacán. Reportes de la DEA señalan que muestras de tierra tomadas por agentes especiales del FBI demostraron que los cuerpos habían sido enterrados en otro lugar y luego trasladados.
El 8 de marzo de 1985, el cuerpo del agente Camarena fue repatriado a Estados Unidos para su entierro.
"Para la DEA y la opinión pública estadunidense, la tortura y asesinato de Camarena marcó un punto de inflexión en la guerra contra las drogas. Su trágica muerte enfrentó a los estadunidenses con la brutalidad despiadada del narcotráfico".
RMV.