El enemigo de mi enemigo es mi amigo; bajo esta premisa de Kautilya, el Maquiavelo hindú, Alito Moreno lanzó la inútil invitación a Máynez para que declinara en favor de su candidata a la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez, antes del tercer debate presidencial; a cambio de este sacrificio, Alito ofreció su renuncia a la dirigencia del PRI y a su candidatura para senador.
La respuesta de Máynez fue negativa, por lo que no tardó en llegar la reacción de Alito, violenta y machista: “Salieron primero muy varoncitos y luego les hizo falta carácter. Hay que decirle a Máynez que si le hacen falta huevos yo le presto. Hay que defender a México”.
Expresiones vulgares y desesperadas ante la imposibilidad de subir en las encuestas, de cara al próximo 2 de junio, según Máynez, con lo que coincidimos.
Lejos de hacer ver a Xóchitl como una aliada, como una amiga del candidato de Movimiento Ciudadano, para Máynez le quedó clara la sentencia de Kautilya: Si los emisarios de Xóchitl son sus agresores y Xóchitl es enemiga de Claudia, por lo tanto, Xóchitl es mi enemiga de Claudia y de Máynez.
Por lo que, el alarde machista de Alito tuvo consecuencias y las vimos en el tercer debate. Al inicio, Jorge Álvarez Máynez explicó el voto útil: “Morena te dice que el voto útil es votar por que no regresen los corruptos del Prian, votar por que sigan los programas sociales y, el Prian, que ya va en tercer lugar, te dice que es votar contra el autoritarismo para que haya democracia”.
Además, dirigió su embestida contra Xóchitl Gálvez y los gobiernos panistas del pasado; mientras que los señalamientos a Sheinbaum fueron más mesurados.
Al abordar el tema de política social, ante la crítica de la panista sobre la escasa construcción de vivienda en este sexenio, Máynez enfatizó el error en la planeación urbana durante el gobierno de Fox, quien construyó vivienda en la periferia, acusó de negociar como lo hace un cártel inmobiliario.
En el segmento de seguridad, Jorge Álvarez Máynez señaló que la gente le pidió que no usara carteles ridículos, que no le faltara el respeto a las personas, en una clara alusión a los carteles de Xóchitl Gálvez; también enfatizó la incongruencia prianista por las postulaciones de los peores delincuentes en los primeros lugares de las listas plurinominales del Partido Acción Nacional y del Revolucionario Institucional al Congreso de la Unión.
En su mensaje final, después del constante ataque contra Xóchitl, señaló que en las universidades les ha invitado a que voten, que votar por alguna de las dos candidatas es mejor a no votar, pero que lo hagan quien los represente, por quien se sientan orgulloso de haber votado.
La actitud del presidente del PRI, Alito Moreno, vulgar y machista contra Máynez por su alusión a elementos del género masculino y estereotipos de género y, contra la propia Xóchitl Gálvez, por no consultarle sobre la estrategia a seguir y dañar su campaña.
Un atropello del que la candidata de Fuerza y Corazón por México tuvo que deslindarse; no obstante, el daño estaba hecho.
No habrá declinación de Máynez en favor de la candidata de Alito Moreno, pues la amiga de Máynez no puede ser Xóchitl.