Esta semana en Singularity Hub encontramos un artículo escrito por Vanessa Bates, en donde detalla que la semana pasada se llevó a cabo un trasplante total de corazón a un paciente de 39 años, con problemas cardiológicos muy serios.
La cirugía se realizó en el Hospital de la Universidad de Duke en Carolina del Norte y lo muy interesante del hecho es que el corazón utilizado para el trasplante es un corazón totalmente sintético de tercera generación. Este corazón, fabricado por la empresa francesa Carmat, que apenas el año pasado recibió autorización de la Unión Europea, ahora solo medio año después ya se logró trasplantar al primer paciente norteamericano.
Carmat obtuvo la aprobación de la FDA el año pasado para probar su corazón en pacientes estadunidenses con insuficiencia cardíaca biventricular en etapa terminal, una afección en la que las cámaras que ingresan y expulsan la sangre dejan de funcionar correctamente.
El Hospital de la Universidad de Duke es uno de los tres centros de trasplantes en los EU que participan en los ensayos, y el equipo quirúrgico del hospital ya se había capacitado para implantar el dispositivo.
Este pesa 900 gramos (aproximadamente tres veces el peso del corazón humano promedio).
La configuración externa es un poco más pesada: los destinatarios deberán llevar alrededor de 4 kg de equipo, incluido un controlador, una bolsa de fluido de actuador y dos paquetes de baterías.
En el caso del paciente de la Universidad de Duke, su corazón artificial permanecerá conectado de forma remota al sistema del hospital para que sus médicos puedan controlarlo y asegurarse de que funciona como debería.
El corazón artificial tiene una cámara para el fluido hidráulico y otra para la sangre, separadas por una membrana.
El lado de la membrana que mira hacia la sangre está hecho de tejido del corazón de una vaca, al igual que las cuatro válvulas del corazón.
Una bomba motorizada mueve el fluido hidráulico hacia adentro y hacia afuera de las cámaras, y ese fluido mueve la membrana para permitir que la sangre fluya.
Pocos días después del trasplante en los EU se realizó un trasplante similar en Nápoles, Italia, que marcó la primera venta comercial del corazón de Carmat. _
