Recientemente trascendió que siete integrantes de la familia de la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde Luján, laboran en el gobierno federal. De acuerdo a La Ley de Austeridad Republicana eso no es nepotismo, ya que este solo se da cuando un funcionario contrata, designa o nombra en la misma dependencia en que labora, a un pariente por consanguinidad o afinidad; a una esposa o concubina.
Como la ley deja fuera el “nepotismo cruzado” (cuando un funcionario designa al pariente de otro en su dependencia; y este nombra al pariente de aquél en la suya), el Presidente López Obrador negó que lo fuera, ya que, los Luján “trabajan en áreas completamente distintas”. Así,tampoco lo son los casos de los hijos del Subsecretario de Gobernación y del Secretario de Turismo que son titular de la Unidad de Asuntos Internacionales de la Secretaría del Trabajo; y presidente de la Comisión Nacional de Boxeo (quien acaba de hacer un baby shower en Cancún), respectivamente.
AMLO encomendó a Irma Eréndira Sandoval Ballesteros investigar el caso. Pero la responsable de investigar el nepotismo es esposa de John M. Ackerman, dirigente de Morena, y aun así miembro del Comité Técnico para la Designación de Consejeros Electorales del INE; su hermano, Pablo Amílcar, en el estado de Guerrero ha sido: candidato a gobernador en 2015, presidente del Comité Estatal de Morena (2015-2018); diputado local con licencia (2018-2021), y coordinador estatal de los Programas Integrales de Desarrollo (por cierto su homólogo de este último cargo en Puebla, Rodrigo Abdalá Dartigues, es sobrino de Manuel Bartlett Díaz, otro caso de nepotismo cruzado). El otro hermano de Irma, Netzaí, desde diciembre de 2018 es director general del Instituto Federal de Defensoría Pública.
Otro problema de la definición legal de nepotismo es que no considera el parentesco ritual, existente entre compadres; el padrino y el ahijado. Se dice que la secretaria de Energía, Rocío Nahle, otorgó un contrato de cinco mil millones de pesos a su compadre Arturo Quintanilla; y que sus sobrinos participaron también -al igual que el hijo de Bartlett- en una licitación del IMSS para adquirir ventiladores para el covid-19. Por supuesto, Nahle negó lo publicado.
Y, si fuera cierto, según la ley favorecer a un compadre no es nepotismo.