Durante la semana, el gobierno mexiquense presentó el Plan de Desarrollo 2017-2023, un plan que apuesta, sobre todas las cosas, por un futuro de bienestar. Se centra en el fomento productivo, la garantía de los derechos sociales y mayor seguridad para generar buenas noticias. Además, con ejes transversales como la responsabilidad gubernamental, las nuevas tecnologías y la igualdad de género, busca establecer alianzas entre autoridades y ciudadanía para trabajar sobre lo que tenemos pendiente, pero también ampliar las cosas que se han hecho bien.
El Estado de México, como ocurrió en la administración pasada, sigue marcando el paso en planeación gubernamental, pues es la primera entidad en desarrollar un plan de desarrollo alineado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Esto es indispensable, ya que hoy las políticas de protección social, planeación territorial y competencia económica marcan que debemos empezar desde lo local. Justo en esta línea, resalta el esfuerzo de la entidad por establecer mecanismos anticorrupción en los municipios.
Sobre lo social, destaca que el gobernador Del Mazo ha propuesto implementar acciones que vayan de la mano con la Estrategia Nacional de Inclusión, enfocadas en garantizar los derechos sociales y un ingreso digno, sobre todo para grupos vulnerables. En este sentido, continuar con la creación de empleos formales será fundamental para acompañar a los programas; solamente así se podrán mantener los buenos resultados contra la pobreza, rompiendo su carácter intergeneracional tanto en lo rural como lo urbano.
Otro punto a destacar es el energético y de servicios. Se planteó ir generando un sistema de energías limpias, algo que forma parte del esfuerzo que hace el Estado Mexicano para cumplir con el compromiso de los países contra el cambio climático. Además, principalmente en el oriente de la entidad, se fomentará el manejo sustentable del agua; en una de las urbes más grandes del planeta, debemos entender que administrar nuestro recurso más valioso es responsabilidad de todos.
De esta manera, la actual administración empieza su camino hacia la construcción de un Estado de México más justo, próspero y dinámico. Hay que reconocer que tenemos muchas fortalezas que nos han posicionado como el punto estratégico del país, social y económicamente. Ahora, para corregir lo que hace falta, tenemos un plan integral, bien pensado y que busca generar resultados basándose en lo más importante que tenemos los mexiquenses: nuestra gente.
