Política

Marcelobsolecencia programada

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Ahora resulta que hay tal cosa como el marcelismo. Una rama no suficientemente estudiada de la zoología política fantástica, como un delirio de Jaime Maussan. Aunque usted no lo crea, hay gente que está dispuesta a defender a su carnal, construyendo una bancada alterna, para presionar para que el distinguido ex Canciller pueda llegar por dedazo a la candidatura presidencial. Una cosa muy fina y muy bonita, muy monrealista, pero que solo tendría sentido si en efecto existieran más marcelistas de los que imagina el ex Canciller en su cabeza.

¡Ay, mi Marche!

Por supuesto, Ebrard tiene todo el derecho al berrinche, sobre todo después de que la gente del KukluxPAN, encarnada en ese personajillo de poca monta llamado Markitititito Cortés, ni siquiera le dio el beneficio de la duda a Marcelo de poder hacer sus propios berrinches, alegando con muy mala leche que Ebrard hizo todo su numerazo porque recibió instrucciones de Palacio. Es decir, que esta clase de espectáculos muy escasamente memorables, donde Marcelo hizo el ridi del ridi, lo hizo por órdenes de AMLO para darle en la torre a la posición. Como si la oposición no fuera muy capaz de autodestruirse así misma cuando Claudio XXX tuitea algo a favor de Xóchitl, como esa imagen donde su campeona alimenta a un niño pobre, que casi ni se ve artificialmente sacada para ver si su gelatinosa narrativa al fin pega, pobrecita. Nomás pensemos en esa otra imagen de la señora del huipil, enmarcada bajo los colores y el logo del PRIcámbrico temprano, en un tono muy echeverrista. Y eso que la venden como una candidata ciudadana y sin partido y ahora resulta que es una chozna de don Plutarco.

Ya he dicho aquí que mi esperanza es que Marcelo anuncie que se va al Frente chafa por México, no solo para destruirlo por dentro como hizo Kinky Téllez, la Rabadán, el ChikiliQuadri y varios más, sino también para ver qué cara pone Xóchitl cuando con la llegada de Chelo, diga con lágrimas en los ojos y con la botarga en la mano: “No me quiero ir señor don Claudio”, mientras se va desvaneciendo como polvo en el viento.

A la Xóchitl lo único que le falta para acabarse de hundir es salir a defender a los mirreyes rompemadres de Puebla.

Algo que solo se puede comparar con el deslinde manchado que le metió la revista Forbes al KukluxPAN, por aprovecharse de sus fotos para la campaña de Lady X. Sintieron que me los estaba desprestigiando.

Otra manifestación de la Marcelobsolesencia programada.

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Jairo Calixto Albarrán
  • Jairo Calixto Albarrán
  • [email protected]
  • Periodista producto de un extraño experimento cultural-social-educativo marxista, rockero, populachero, libresco y televisionudo / Escribe de lunes a viernes su columna "Política cero"
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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