Personalmente le quiero agradecer a Barbie porque gracias a su querida presencia y a su película, hemos podido recuperar el color rosa que había sido secuestrado por el sector opositors. A mí, la verdad, sí me daba terror calzarme algún atuendo para homenajear a La pantera rosa, pues me podían confundir con uno de esos extraviados que estaban defendiendo al INE de mi Tatankita Córdova, de Ciro Murayamasamí y de que no te haga bobo Edmundo Jacobo, grandes demócratas que odian a la democracia. Es como andar ahorita de huipil, simplemente te chamuscas. Fue por Barbie que se repatrió esa pigmentación que parecía propiedad de seudofifís, de la Gordillo, Madrazo, Markitititito Cortés, Zambranitititito, Alititititito Moreno y de Clauditititito XXX.
Ahora que la convocatoria en la película pedía que los espectadores fueran de rosa para hacer juego con el Pantone de Barbie, pudimos de nuevo portarlo con gusto, sin el temor a ser confundidos con Loret, Brozo, el Trujillo Tenebroso, Alazraki y los paleros de Salinas, ¡Dior me libre!
Gente que cada vez está más desaforada y furiosa instalada en la vistimización, no solo por amanecerse a cada rato hasta el fondo en las encuestas (y con todo el billete que le han invertido en el whitexican photoshopeo de Lady X que no agarra ni un resfriado), sino porque ahora el Inegi revela que el combate a la pobreza y a la pobreza extrema ha funcionado. Mientras desde el PRIANChu gritan que esto es el apocalipshit venezolano y desde el mainstream mediático salinista se metamorfosean en Beatriz Pagés (y ejecutan más melodramas sobreactuados y telenoveleros que Creel), las cifras son contundentes e inobjetables: al ritmo de “Primero los pobres”, se le bajaron 6 puntos a la brecha para que 5 millones de mexicanos –que no es cosa menor, habría dicho en otros tiempos Carmen Aristegui cuando era Carmen Aristegui— salgan del infierno.
Ya para que les dé la dispepsia cuata, el FMI, al que tanto adoran como si fuera su Palo Mayombe, anunció que el crecimiento de México se elevará más de lo previsto, mientras baja de manera importante la inflación.
Vales chorros, nunca cambies Barbie. Te pido perdón por la afrenta del PRD que intentó, en uno más de sus azotes delirantes, inventar una Barbie perredista. Ya nada más falta que saquen una Barbie del INE inspirada en Lorenzo Córdova con los ojos de toro loco y gritando “¡Nos están venezolanizando!”.
¡Le creo a Maussan, sí he visto a Alien como Calderón!