Mucha gente que no está bien informada y que piensa que los que no tienen al Ejército a su servicio también pueden cometer un golpe de Estado ha tachado de viejo ridículo y títere de Trump al secretario general de un organismo tan prestigiado que casi ni ha estado al servicio del Tío Sam desde su fundación como la OEA, al señor José Luis Almagro que, la verdad, tiene más facha de facho que el general boliviano William Kalimán que ni tiene serenidad ni mucho menos paciencia. Y todo esto solo porque dijo que en Bolivia en efecto sí hubo un golpe militar, pero no por parte de las hordas gorilescas que ahora mismo se enfrentan a quienes, tristemente, no aceptan su mandato por considerarlo injustamente espurio tanto como a la señora presidenta interina que es como la Laura Zapata de por aquellos lares, sino por parte de Evo Morales que se quería perpetuar al nivel de un líder sindical.
Claro, se le olvidó a Almagro que varias instituciones gringas como el Center of Economics and Policy Research nomás no encuentra evidencias de chanchullos electorales ni remotamente parecidos a los de Jelipillo Calderón en 2006.
Así, la competencia por el Premio al Perfecto Idiota Latinoamericano Ultraderechoso (un homenaje a esa categoría inventada por los cachorros de la revolución (Neo) liberal encabezada por Vargas Llosa) está en su momento culminante. Tenemos en la lucha combativa al ChikiliQuadri que en un tuit que habría aplaudido mi General Gaytán (¿no estará este muchacho tras las movilizaciones de los federales en lucha que salieron buenos para las neymariñas y quieren que, además de que los atiendan en el ABC —donde no estuvo ni José José—, casi el Castillo de Chapultepec nada más empezar a llegar a un acuerdo), anuncia que en realidad Salvador Allende se suicidió nada más para desprestigiar a Pinochet que Hitler era un ser de luz y que Robero Deschamps es probo porque ya lo probó, digo aprobó, Markitititito Cortés, como está muy ávido de notoriedad, también quería entrarle gracias a sus demostraciones de amor a las dictaduras, pero perdió ánimos después de que el subjefe Diego se declaró en contra del PAN y por primera vez a favor de la 4T, al aprobar el asilo político Evo Morales. A los panistas no les dio una diarrea cuata, sino con propulsión a chorro.
Nomás no se me pongan como Gustavo Madero, plis.
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