Morena en Tamaulipas ya tiene listos sus 90 consejeros estatales para iniciar la renovación
de sus cuadros directivos y poder pasar de ser un movimiento social para convertirse en un auténtico partido en el poder; un partido fuerte, organizado y preparado para dar la batalla en el 2024. Un partido aliado y confiable como requiere el gobernador electo, Américo Villarreal Anaya. Lo anterior se dio a través de la jornada electoral realizada el pasado sábado en nuestro estado y donde hubo poco espacio para los militantes de a pie en ese partido, los que creen en su partido pero no tienen padrinos para promoverse y aspirar a ser consejeros.
Lo único inaceptable es que los consejeros electos en su mayoría, son los mismos que ya ocupan un cargo de elección popular como alcaldes, diputados locales y federales, regidores y hasta familiares cercanos a los mismos.
Sin duda estos nuevos consejeros tendrán voz y voto para elegir la nueva dirigencia estatal y decidir, entre otras cosas, a los próximos candidatos que participarán en las elecciones del 2024 y poder impulsar desde ahí, a sus amigos y familiares. Esa es la principal razón de los próceres morenistas para seguir acaparando posiciones en un partido que había ofrecido ser distinto.
Esta jornada de elección interna del partido de AMLO no estuvo exenta de las viejas prácticas del PRI, como el acarreo de electores, el relleno de urnas, la compra y la inducción del voto; además, fueron evidentes las presiones a los adultos mayores para que participaran en este ejercicio, bajo la amenaza de que podían perder sus pensiones.
Pero vayamos a los resultados: en la zona sur, el octavo distrito, integrado territorialmente por el total del municipio de Tampico y la parte sur de Ciudad Madero, destacaron por su activismo y operación política, Olga Sosa, Mónica Villarreal Anaya y Úrsula Patricia Salazar, quienes resultaron electas consejeras; además en este distrito, la sorpresa fue Erasmo González Robledo, por haber conquistado el primer lugar de la votación sobre los otros cuatro consejeros varones electos; estos últimos se suponía que tenían mayor presencia en este distrito. Haiga sido como haiga sido, habemus consejeros. _
