A Gil aún le sorprenden algunas noticias; una de ellas publicada en su diario El Universal le provocó a Gilga una taquicardia. Lean y no duden de la probidad informativa de Gamés. “Funcionarios del Pentágono señalaron en un borrador que extraterrestres podrían estar visitando nuestro sistema solar y lanzando sondas más pequeñas como las misiones que lleva a cabo la NASA cuando estudia otros planetas”. Carambas: esto no sabe a jugo de tomate.
Lean y no tengan miedo, hay buenas personas en otras galaxias, o como se llamen: “el 7 de marzo se publicó un borrador de un informe de investigación redactado por Sean Kirkpatrick, director de la oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios del Pentágono, y Abraham Leob, presidente del departamento de astronomía de Harvard, centrado en las limitaciones físicas de los fenómenos aéreos no identificados”. Es decir, no son precisamente unos charlatanes.
Pues bien: el artículo, aún en revisión señala que una serie de naves extraterrestres estarían enviando sondas a la Tierra mientras se desplazan por diferentes zonas de nuestro sistema solar. Lo que nos faltaba: que efectivamente Maussan tuviera razón, y antes de él Pedro Ferriz: un mundo nos vigila. El documento, prosigue la nota de su periódico El Universal, plantea la posibilidad de que una nave nodriza, proveniente de una galaxia lejana, la cual llevaría varias décadas estacionada en un punto fijo del sistema solar. Desde allí continuamente lanzaría pequeñas naves para estudiar los planetas que son del interés de la especie extraterrestre. O sea, como el Viaducto en hora pico y un trailer que avanza lentamente. A Gil no se le ocurre nada más cercano a la nave nodriza.
Encuentro
Según informes secretos que sólo tiene en su poder Jesús Ramírez Cuevas, uno de los avistamientos, que así les llama el sabio Maussan, ocurrió muy cerca de la Ciudad de México. Dicen que en Palacio Nacional al Presidente no se le movió ni un pelo, pero eso sí, ordenó sus buenos tamales de chipilín.
Dicen las fuentes más secretas de las fuerzas armadas, inteligencia militar, Pegasus, Sugus y Certs que una pequeña nave desprendida de la gran nave nodriza se comunicó con Jesús Ramírez Cuevas. Queremos conocer a su líder, dijo una voz metálica que quiso ser amable. Trémulo, y no era para menos, Jesús le informó al Presidente: Señor, los extraterrestres quieren hablar con usted. Qué vengan, Jesús. Y ocurrió un encuentro secretísimo en Palacio Nacional.
Un trascendido informó, o desinformó, que a los extraterrestres se les salían los ojos (estos extraterrestres tienen ojos) en Palacio Nacional. El encuentro duró no más de quince minutos pues a Liópez Obrador estos seres no le parecieron interesantes y lo apremiaba una gira: no nos detengamos en naderías, necesitamos a cuatro buenos consejeros del nuevo INE. Y estos extraterrestres son unos hipócritas, racistas, clasistas y corruptazos. No sabía yo, Jesús, que la corrupción era un problema interestelar. En cambio acá ya la erradicamos. Jesús, por favor, cita a Bartlett para que charle con estos seres y no me vengan con que son muy parecidos Manuel y los extraterrestres. No, señor, van a comer unos tacos en la Tía Chula. A los extraterrestres les encantaron los tacos de suadero, los consideran una vitamina inigualable.
Urgencia política
Según el borrador de estos científicos, las sondas o naves son invisibles para los telescopios de rastreo porque cuentan con un sistema de camuflaje que no refleja la luz del sol, de modo que se vuelven invisibles para los instrumentos que usa la especie humana para monitorear el cosmos. Qué atrasados estamos, ¿se dieron cuenta? Mientras aquí se intenta desarmar al INE, allá han desarrollado sistemas de blindaje impresionantes que engañan incluso al padre Sol. Y aquí, haciéndole las cuentas de la liquidación a los consejeros que abandonan el INE. No somos nada.
En lo personal, Gil espera un contacto con alguna de las pequeñas naves invisibles y alguno de los extraterrestres para concertar citas secretas con Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard. ¿Cómo podría Gilga llegar a la nave nodriza?
Todo es muy raro caracho, como diría Francis Bacon: “el hombre cree con facilidad lo que teme o lo que desea”.