Política

Cueca boliviana

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Se alborotó el cotarro. El golpe de Estado en Bolivia hizo estallar las reacciones, a favor de Evo Morales, contra él; en la redes sociales se dan con todo, se insultan e infaman. Según Gil no parece difícil de discernir: si los militares aparecen en público y afirman que le han pedido la renuncia a un presidente civil que aún no termina su mandato, a eso se le llama golpe de Estado. Con la pena. Y si ese presidente se ha montado en la mula de la reelección, lleva 14 años en el poder, perdió un referendo y luego se robó una elección, ese hombre es al menos un serio aspirante a dictador (o ya lo es: un bebé dictador).

Como una centella progresista, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, se pronunció contra el golpe militar en Bolivia. “Hubo un golpe (de Estado) porque como saben se dio a conocer un reporte de la OEA en relación al proceso electoral y el presidente (Evo Morales) propuso que realizarán nuevas elecciones cosa que el gobierno de México vio bien. México no vería ni aceptaría un gobierno militar en Bolivia”.

El canciller ofreció asilo al ex presidente Morales por conducto de su cuenta de Twitter: “México, de conformidad a su tradición de asilo y no intervención, ha recibido a 20 personalidades del ejecutivo y legislativo de Bolivia en la residencia oficial en La Paz, de así decidirlo ofreceríamos asilo también a Evo Morales”.

A Gil no le sorprende que el gobierno mexicano dé asilo político a Evo Morales, sus políticas públicas, o como se llamen, son parecidas: desmantelar todo lo que venga del pasado, el Presidente representa al pueblo, las instituciones estorban, las elecciones, la verdad, también.

Derechos de autor

Una nota de Jannet López Ponce en su periódico MILENIO informa que “el presidente Andrés Manuel L(i)ópez Obrador reveló que él fue quien dio la instrucción de ofrecer asilo político al ex presidente de Bolivia, Evo Morales”. Luego luego la caravana con el sombrero ajeno. En la mañanera, Liópez Obrador dijo estar muy orgulloso de encabezar un gobierno que garantiza el derecho al asilo: “en este caso decirles que me siento muy orgulloso de encabezar un gobierno en donde se garantiza el derecho de asilo; es un timbre de orgullo (...) También que quede claro, y ya después entramos a los pormenores, yo di la instrucción de ofrecer el asilo”. El Presidente agradeció al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y a las fuerzas armadas por haber llevado a cabo el traslado de Morales.

El mandatario comentó que hay personas que no están de acuerdo con el asilo político, pero también aseguró que no seguirá con el “camino trillado de siempre”, porque estamos en la cuarta transformación. El canciller dijo que hasta el momento, el Presidente y Evo Morales no han tenido comunicación.

Perdón, pero ¿cuál camino trillado de siempre?, si México se ha caracterizado por asilar perseguidos políticos, sean españoles, chilenos, argentinos. ¿También ese pasado es inservible? Gilga se quiere dar un tope de los fuertes en uno de los muros del amplísimo estudio.

Por su parte, una nota de la redacción de su periódico Excélsior informa que al llegar a México, Evo Morales agradeció al presidente López Obrador por salvarle vida al ofrecerle asilo político. “Estamos agradecidos porque el presidente de México y el pueblo boliviano me salvaron la vida. Gracias a México y a sus autoridades”. Luego, el tiempo de las mentiras: Morales declaró que tras los comicios del 20 de octubre se comenzó a orquestar un golpe de Estado al que se sumó la policía nacional: “mientras tenga la vida seguimos en política, mientras tenga la vida, sigue la lucha y estamos seguros que los pueblos del mundo tienen el derecho de liberarse”. Bailemos la cueca boliviana y todos de acuerdo. Pañuelos blancos. ¡Venga! Es que de veras.

Derechos humanos

Así ocurrió: con 77 votos contra 43, el pleno del Senado rechaza citar a Rosario Piedra Ibarra a tomar protesta, repetir todo el proceso de elección para la CNDH, usar el tablero electrónico en una nueva votación de una terna y dar cuenta a la contraloría interna. Como diría la extinta madre de Gamés: se les cayó el teatrito.

Todo es muy raro, caracho, como diría Kant: El derecho es el conjunto de condiciones que permiten a la libertad de cada uno acomodarse a la libertad de todos.

Gil s’en va

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Gil Gamés
  • Gil Gamés
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  • Entre su obra destacan Me perderé contigo, Esta vez para siempre, Llamadas nocturnas, Paraísos duros de roer, Nos acompañan los muertos, El corazón es un gitano y El cerebro de mi hermano. Escribe bajo el pseudónomo de Gil Gamés de lunes a viernes su columna "Uno hasta el fondo" y todos los viernes su columna "Prácticas indecibles"
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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