En una semana extrema donde la temperatura alcanzó sus máximos históricos en el país, debido a una serie de tormentas solares geomagnéticas que llegan a niveles preocupantes, al mismo tiempo se dispara peligrosamente el termómetro político a solo unos días que se realicen las elecciones presidenciales en donde los mexicanos tendrán que decidir por el cambio o la continuidad.
Según estudios científicos, el estrés por el calor puede incrementar la irritabilidad y el comportamiento agresivo de las personas, pero además el medioambiente es más delicado por el alto número de incendios que se han registrado en todo el país, los cuales son más numerosos en el Estado de México, Morelos, Puebla y en la propia capital.
Como si se tratara de una película de ciencia ficción -Cuando el Destino nos Alcance- universidades y científicos del país, habían alertado hace muchos años a nuestros gobernantes que de continuar con la deforestación y la degradación ambiental de nuestras áreas verdes y selvas íbamos a padecer de agua y alimentos en un futuro lo que pondría en jaque a la población, y ese futuro del que hablaban ya llegó y no hicimos nada para detenerlo.
Hoy sabemos que los principales detonadores son los incendios forestales, muchos de ellos provocados por la mafia; el cambio de uso de suelo por fraccionamientos; la tala ilegal, entre otras muchas razones se ha derivado a una afectación del 84% de todo el territorio nacional, con un aumento en promedio neto anual de 127 mil 800 hectáreas.
Según estudios México es uno de los países más vulnerables ante el cambio climático, a causa de sus características geográficas, socioeconómicas, corrupción, políticas equivocadas y peligrosamente en el avance de la delincuencia organizada en la extorción y derecho de piso a los productores y transportistas de alimentos que nadie se atreve atender y quien lo debería hacer no lo hace.
La ciencia no ha sido tomada en cuanta en nuestro país para su desarrollo, se hace lo que los gobiernos en turno les convienen o se les ocurre políticamente, la ciencia y la planeación no caben en los países corruptos. Estamos en los umbrales de una peligrosa situación que podría llegar a un desorden social por la falta de agua, alimentos y energéticos.
Finalmente a todos los mexicanos, profesionistas, universitarios, trabajadores, obreros, campesinos y a nuestros jóvenes: tienen la oportunidad de decidir el futuro del país, los convoco a votar y a participar; hagamos la diferencia por el futuro de las niñas y los niños, y por un país con desarrollo científico y tecnológico.
FRONTERA. “Lo felicito por su artículo, ojalá pudiera tratar el tema de la falta de apoyo de los seudocientíficos del gobierno mexicano y ojalá pudiera tratar el tratado McLane-Ocampo que nos impide a los inventores mexicanos registrar en este país nuestras creaciones”: Gerardo Oviedo (lector).