Que el ingreso al Hospital General de Cholula de Lisset “N”, señalada por el homicidio de tres estudiantes y chofer de Uber, por presunta amenaza de aborto, causó mucha incomodidad entre personal médico y de enfermería; tuvieron que lidiar con sentimientos encontrados de profesionales para atenderla como paciente, pero sabiendo que era la copartícipe del múltiple crimen de los tres estudiantes de Medicina; finalmente, se impuso el juramento hipocrático.
Lo que sí género temor entre el personal del Hospital fue el riesgo de que algún grupo criminal intentara rescatarla o atentara contra ese mujer, quien deberá afrontar la audiencia con el juez de control por los delitos de homicidio y robo de vehículo, pero siguen las pesquisas de la Fiscalía porque hay más implicados.
Que a propósito de policías y ladrones, resultó por más sorprendente y poco digno para su uniforme militar que el vicealmirante Miguel Idelfonso Amezaga Ramírez aceptara hacerse cargo de la Policía Auxiliar, lo que no se puede entender ni como un premio de consolación para seguir en la nómina, porque cuenta con experiencia en otras áreas de la Marina para el servicio de México.
Que los estudiantes de la UAP que mantienen el paro de labores en 22 unidades académicas en protesta por los crímenes de los estudiantes de medicina y por la demanda de seguridad pública, accedieron a la petición de trabajadores administrativos para que ingresar a las instalaciones y no afectar diferentes trámites escolares, administrativos y de mantenimiento de la Universidad, lo que refleja la madurez de los universitarios.
