Que se cocina la relación de dos miembros importantes en el gabinete de Claudia Sheinbaum con el Gobierno de Tamaulipas. Primero, de interés más amplio, será la presencia de Omar García Harfuch, próximo secretario de Seguridad, un tema tan relevante para los habitantes como para la administración de Américo Villarreal Anaya.
Que lo segundo es la interacción con Mario Delgado, el futuro titular de la Secretaría de Educación Pública. Muchos de los ganadores de la pasada elección tuvieron su respaldo, aunque el todavía dirigente de Morena se ausentó en la campaña. Al menos se librará de las quejas de militantes fundadores por haberlos marginado.
Que la designación en delegaciones federales en el estado, trascendió, se palomeará desde Palacio de Gobierno. Esto anima a varios personajes sin candidatura a entrar en el ánimo de Américo Villarreal y tener un sitio el próximo sexenio. Algunos guardan sus ansias y esperan los tiempos, por aquello de moverse mucho y quedar fuera a la hora definitiva.
Que los productores sorgueros del norte de Tamaulipas tienen previsto continuar este viernes con su bloqueo carretero y, tal parece, ni Beryl los espanta, pues como tormenta tropical llegará el sábado al Golfo de México, donde estará preparándose y recuperando fuerza para volver a ser huracán y pegar sobre San Fernando y Matamoros.
Que Movimiento Ciudadano “pepena” una regiduría en el próximo cabildo de Mónica Villarreal en Tampico, lo que detiene la asignación de asientos plurinominales pues hay una impugnación de por medio, no para modificar los resultados y darle el triunfo al naranja, sino para tan solo conseguir una posición pluri en el siguiente cuerpo edilicio.
Que este jueves se celebró en Xicoténcatl el festejo a los padres por su día. El acto anunciado por la alcaldesa Noemy González tuvo como protagonista a su esposo Vicente Verástegui, al ser tomado por las damas protagonistas del show y bailarle de manera sensual, lo cual fue aplaudido por los asistentes, incluida su pareja.
