No hubo sorpresas. El gobierno estatal, en voz de Enrique Alfaro, anunció las nuevas medidas sanitarias adoptadas en Jalisco por el covid-19. Como se preveía, habrá regreso total a clases en educación básica y ampliación de aforo en actividades comerciales, deportivas y culturales. La decisión se tomó desde el pasado jueves, pero se hizo el anuncio ayer para dar tiempo a informar a dirigentes de cámaras, agrupaciones sindicales y sociales a socializar el tema entre los suyos. Los primeros sondeos dejan ver que todos los anuncios fueron bien aceptados por los ciudadanos, sobre todo porque la Zona Metropolitana de Guadalajara tiene una gran vocación comercial, y se avecina la temporada de ventas navideñas.
Un diputado jalisciense figuró entre el grupo al que le correspondió cuestionar a Lorenzo Córdova en San Lázaro. Hamlet García Almaguer, de Morena, le recriminó al presidente del INE haber obstaculizado el ejercicio de revocación de mandato, mediante un acuerdo que limitaba la participación a formatos electrónicos, mismo que fue revocado por la Sala Superior del TEPJF. Además, le llamó traidor a la democracia, previa lectura de la definición por parte de la Secretaría de la Mesa Directiva, y le preguntó cuándo se reduciría su salario, un reclamo permanente de Morena y PT. Salió bravo.
Haciendo a un lado el tema de la elección extraordinaria en curso, en Tlaquepaque la administración municipal que encabeza Rafael García Íñiguez camina a buen ritmo. Y es que cuando se anuló la elección pasada, y se nombró al actual Concejo Municipal, la principal preocupación de los habitantes de la Villa Alfarera era que se mantuvieran funcionando los servicios que prestan las autoridades (seguridad, aseo, alumbrado...), lo que ha ocurrido sin ningún problema. La veda electoral mantiene en bajo perfil a García Íñiguez, pues no quieren interferir de ninguna manera en el proceso, pero quienes le conocen señalan que el concejero presidente ha estado atento de todas las obligaciones a su cargo.
No se hizo público, pero en el gobierno estatal señalan que el tema de las multas por uso de portaplacas en automóviles provocó el enojo del gobernador, quien de plano le jaló las orejas a un par de funcionarios por reforzar las multas sin socializar el polémico asunto.
