Política

“Mala feminista”

Siempre hay una “mala feminista”; como Ana, que tiene 16 años y lleva su cartel con un personaje animado, se toma selfies y las sube a sus redes, no se siente tan cómoda con las pintas en monumentos, no le parecen algunas consignas, tiene sus dudas sobre el aborto o, por alguna razón, quiere ir acompañada por su hermano a la manifestación. Siempre hay una mujer que quiere subirse a la ola violeta, pero termina ahogada.

Participar en las marchas y sentir esa convergencia entre todas es una experiencia única -ojalá hubiera vivido algo así en mi adolescencia-, pero también hay quienes tienen posturas tan impositivas que rompen con el principio básico de la empatía.

Y es que ser parte de un movimiento social, el que sea, viene con una serie de reglas no escritas en las que no todas las personas caben, y lo mismo sucede en el feminista. Hay tantas variantes que se olvida que la bandera puede tener diferentes tonalidades, pero la esencia es la que ha hecho que cada vez más decidan integrarse a las marchas del 8 de marzo. 

En 2020, más de 35 mil caminamos juntas por las calles de Guadalajara, y tres años después fuimos 70 mil, y todavía faltan muchísimas que por mil razones no han podido o querido ir a la movilización pública, pero luchan día a día desde su trinchera para erradicar el discurso machista y patriarcal y construir sororidad, y eso no las hace ni más ni menos feministas que las que salen a marchar.

Hemos avanzado mucho en la eliminación de esta competencia entre mujeres que durante décadas nos fue impuesta socialmente como para permitir que dentro de un movimiento creado para unirnos, apoyarnos y crecer como individuas y colectivas, haya divisiones y juicios porque no se ajustan a los estándares personales o de una corriente. 

Hoy volvemos a tomar la ciudad, y debemos recordar que lo hacemos para visibilizar las violencias de las que somos objeto, exigir justicia e igualdad, en vías de erigir una sociedad más equitativa y armoniosa. Ese es el fondo, eso es lo importante, porque nunca va a faltar quien critique las formas. Exprésate como quieras y lo sientas, vive la experiencia como tú decidas, desde tu perspectiva y contexto, y quizá, en unos años, optes por manifestarte de otra manera, quizá no, no importa, al final, para alguien, siempre serás una “mala feminista”. 


Google news logo
Síguenos en
Dora Raquel Núñez
  • Dora Raquel Núñez
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.