Pasadas estas elecciones venideras, tendremos partidos locales nuevos, así como lo lee, llegan a la arena nuevas opciones.
Un partido local es como su nombre lo indica, un partido político de alcances estatales, es decir, no tiene representatividad nacional, pero participa en los derroteros a donde están circunscritos, para el caso, Hidalgo.
Dicho esto y después de que 14 organizaciones civiles en su momento levantaran la mano para constituirse como fuerza política, al final del tramo solo dos fueron las ganonas, llamándose a partir del primero de julio uno Espacio Hidalgo y otro Encuentro Solidario Hidalgo.
Y así como cuando uno hace su cambio de sexo, más o menos pasó acá, solo que con estas agrupaciones primero empezaron como estructuras constituidas por ciudadanos de a pie, sin fines de lucro y apartidistas, pero al final la llamada al cambio las convenció para ser algo sutilmente diferente a como nacieron.
Es bueno que haya más diversidad, que se escuchen otras voces, caras y propuestas nuevas, en estricto sentido si, esa debiese ser la razón de ser cuando una nueva fuerza política llega al escenario electoral, pero por otro lado también está la otra cara de la moneda, la que, y triste es decirlo, es la más conocida por el pueblo.
Esta la cara que muestra el beneficio de unos cuantos enmascarándose en grupos que desean el bienestar general, cuando de fondo es crear contrapesos a los que están en el poder, allegarse al mejor postor que les ofrezca permanencia política y por supuesto lo más importante, acceder al tan deseado financiamiento político que todos buscan, en otras palabras a empezar a vivir de los impuestos que usted y yo pagamos, beneficio que hasta hoy se lo llevaba todo Nueva Alianza, partido creado por ya sabe quién. Espero en verdad que estos dos lleguen a sumar y como cuando se crearon como organizaciones civiles en el pasado, continúen velando por los intereses ya no de sus miembros sino también por el resto de los hidalguenses.