Quizás no te acuerdes, pero a lo largo de mis colaboraciones te he contado que también ayudo a emprendedores a comprender la estructura, enfoque y visión de la actividad económica que están realizando y darle un sentido real de modelo de negocio.
Déjame aterrizar lo que acabo de decir: una actividad económica es aquella que una persona realiza, de manera semi formal y/o semi profesional, con la que obtiene recursos extra, normalmente financieros, y que en la mayoría de las ocasiones es adicional a una actividad o empleo principal. Por su parte, el modelo de negocio es la estructura formal y profesional de la actividad, y que tiene definida una estructura operativa de los recursos y procesos clave que le ayudarán a conseguir objetivos claros.
El hecho de pasar de una actividad semi formal a un formato de modelo de negocio profesional implica, justamente, trabajar con las etapas que dan nombre a esta colaboración. La generación es la definición suficientemente buena y viable de las actividades que le dan sentido operativo al formato formal deseado. La degeneración es cuando esas actividades se van depurando y vamos eliminándolas dentro del catálogo de procesos. La regeneración es cuando identificamos los procesos que realmente dan sentido y oportunidad de mercado al modelo de negocio, y los ajustamos para estandarizarlos hasta un punto de calidad ideal.
El punto clave (para mí) es que comprendas que todo modelo de negocio debe ser dinámico, y hay muy pocas cosas escritas sobre piedra. Identifica en qué estatus te encuentras y permite que el desarrollo de estas etapas haga la noble labor de sacar la mejor versión de tu negocio, porque, además, este es el ciclo de vida natural de las empresas. Así que agenda tu intervención para análisis, hacer planeación y a renovarse. Éxito. _