Ahora que todo mundo se ha mostrado tan pacifista —sí, ajá— condenando la violencia contra comercios en la marcha del viernes pasado en la colonia Roma-Condesa, pero, eso sí, avalando lo que decían los que al mismo tiempo de gritar aventaban piedras, vale la pena revisar la actuación de la autoridad aquel día.
Corrijo, la no actuación de ninguna autoridad aquel día, por lo que no hay mucho que revisar. Los policías, todos se retiraron. Los enmascarados que se sumaron a la marcha, como se suman a tantas otras manifestaciones, hicieron lo que quisieron como gustan hacer cada vez que se infiltran. Por desgracia, esto se va haciendo costumbre.
Ni un policía. Ahí, en esas calles que son un poco el corazón de la ciudad, esas calles que sí, generalmente están llenas de policías de todo tipo y de toda institución. Eso sí, como tantas veces en el México de la violencia que vivimos hace décadas, al día siguiente ahí estaban.
Tomo la nota de nuestro diario: “A través de recorridos, este sábado 5 de julio, el secretario de Participación Ciudadana, Tomás Pliego Calvo, y la subsecretaria de Participación Ciudadana y Prevención del Delito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Ciudad de México, Paulina Salazar Patiño, visitaron los establecimientos que resultaron dañados tras la manifestación contra la gentrificación; el secretario Tomás Pliego informó que habrá reuniones subsecuentes para mantener el diálogo directo y que cuentan con el apoyo de la jefa de Gobierno para realizar sus actividades comerciales. Por su parte, la subsecretaria Paulina Salazar proporcionó los números de contacto del jefe de cuadrante y la jefa de sector, en caso de requerir acompañamiento de la policía”.
No sé, a lo mejor soy yo, pero pienso que lo del apoyo de la jefa de Gobierno se pudo haber demostrado no el sábado 5, sino el viernes 4, cuando sucedía lo que sucedió. Y lo del número de contacto de los policías, pues sí se marcaron desde el viernes, es más, redes y medios lo reportaron al tiempo que sucedía, no es que se necesitara una llamada.
Los enmascarados volverán a la próxima marcha. Ellos, tranquilos.
Ya que andamos en eso, ¿qué sabemos de los asesinos de Ximena Guzmán y José Muñoz? Pasan y pasan las semanas y nada. Creo que es una duda razonable.
