Política

AMLO y su cateterismo cardiaco

Estoy aterrado ante el pésimo manejo de la comunicación de lo que ocurrió con el presidente de México el viernes pasado.

Como usted sabe, Andrés Manuel López Obrador fue sometido a un cateterismo cardiaco.

¿Y cómo nos lo manejaron? Como si hubiera ido con el pedicurista.

No, señoras. No, señores. Esto no es un asunto menor.

Si Andrés Manuel López Obrador se la pasó “informándonos” cuando le volvió a dar COVID, ¿por qué aquí calló de semejante manera? ¿Entiende usted el pánico que genera este contraste?

Un cateterismo cardiaco se planea. Y si no se planea, es porque algo mucho muy grave apareció de repente. ¿Fue a consecuencia del COVID?

Lo veamos por donde lo veamos, así no se comunica la salud de ningún presidente.

¿Nuestro poder ejecutivo tiene problemas de corazón? ¿El señor ya lo sabía y nos lo ocultó? ¿Por qué? ¿No lo sabía y está tan sorprendido como nosotros? Perfecto, le deseamos pronta recuperación. ¿Qué va a pasar ahora?

No sé usted, pero yo me acuerdo que a Vicente Fox le llovieron ataques porque tomaba antidepresivos mientras trabajaba de presidente.

¿Y qué me dice de Felipe Calderón y su supuesto alcoholismo?

¿Nadie va a decir nada ahora con AMLO? ¿Por qué? ¿Por miedo, censura o autocensura? ¿Pues no que estábamos mejor? Perdón, pero yo tengo la cabeza llena de dudas.

¿Quién se hizo cargo de la presidencia de México durante los pocos o muchos minutos que López Obrador estuvo “relajado” mientras lo atendían?

¿En qué consistió esa “relajación”? ¿Hubo anestesia? ¿Qué hubiera sucedido si algo malo hubiera pasado en ese instante?

¿Quién fue el médico que lo atendió? ¿Por qué él o por qué ella? ¿Cómo lo seleccionaron? ¿Qué técnica utilizó? ¿Cuánto tardó? ¿Cuánto costó?

¿Le fue bien o le fue mal a AMLO con relación a como les va a otros pacientes? ¿Qué ocurre cuando una mexicana o un mexicano común y corriente necesita hacerse este procedimiento?

¿Quién acompañó físicamente a don Andrés Manuel al hospital? ¿Dónde estaba su familia? ¿Ellos sabían o no sabían de esto?

¿Quién lo cuidó más allá del tema personal? ¿Quién lo protegió en su calidad de líder de la nación?

¿Qué va a pasar ahora? ¿En qué va a afectar este procedimiento la salud del presidente? ¿Cuáles son sus expectativas de vida? ¿Qué repercusiones habrá en su manera de trabajar, de tomar decisiones, de dirigir al país?

¿AMLO va a fingir demencia porque es un mártir o por arrogante? ¿Existe la posibilidad de que a partir de este evento cambien las cosas en la Cuarta Transformación?

¿Ahora entiende cuando le digo que estoy aterrado? Minimizar una noticia de esta naturaleza no es comunicar, no tranquiliza, no ayuda. Al contrario, es una invitación a la especulación.

Por si todo esto no fuera suficiente, como el estilo de nuestro presidente es tan peculiar, las cosas se ponen peor.

Cualquier persona que pregunte puede ser acusada de enemiga, de conservadora, de violar su derecho a la privacidad, de desearle el mal.

Cualquier persona que no diga nada, de solaparlo, de ocultar información, de poner en riesgo la seguridad del país y de ser parte de una suerte de conspiración como de película de la Guerra Fría.

Tan fácil que hubiera sido comunicar hacer las cosas bien desde un principio. ¿O usted qué opina?

Álvaro Cueva


Google news logo
Síguenos en
Álvaro Cueva
  • Álvaro Cueva
  • [email protected]
  • Es el crítico de televisión más respetado de México. Habita en el multiverso de la comunicación donde escribe, conduce, entrevista, da clases y conferencias desde 1987. publica de lunes a viernes su columna El pozo de los deseos reprimidos.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.