Jalisco es conocido frecuentemente como el alma de México, bien reza la canción, la capital tapatía, Guadalajara tiene el alma más mexicana. Hablar de la Perla de Occidente, es sacar a relucir una vasta cultura, llena de tradiciones y contribuciones a la rica historia de México.
A Jalisco lo definen muchas cosas: el tequila que enciende las fiestas, las tortas ahogadas que queman el paladar y el mariachi que pone a vibrar el corazón. Pero hay una pasión que se vive más allá del folclore y que se respira en cada rincón del estado: el futbol.

Jalisco tierra de glorias del fútbol internacional
En los inmuebles mismos, la entidad puede presumir algo que pocos. La icónica Brasil de Pelé, la de Zico; la Francia de Platini e infinidad de figuras han pisado el engramado del Estadio Jalisco. Ahora, el Estadio Akron también comenzará a escribir su historia internacional con la Copa del Mundo a celebrarse el año próximo.
Ninguna otra entidad en México puede presumir lo que encierra la tierra del Mariachi y el Tequila: 33 clubes profesionales en la actualidad en las distintas ligas, una cifra que ningún otro estado ha alcanzado. Aquí el balón comenzó a rodar desde los albores del siglo XX y nunca se detuvo.

Presente, pasado y futuro: el futbol no para en Jalisco
Chivas, Atlas, Leones Negros son los emblemas, pero también hay fantasmas del pasado que gritan desde la tribuna del recuerdo: Jalisco, Nacional, Oro, Gallos, Zapotlanejo, Tecomán, Cachorros, Tapatío, Atlético Jalisco... equipos que alguna vez soñaron con la gloria y que hoy habitan en la memoria.
Y todo ese amor por el balón se ha respaldado con gloria. Chivas con 12 títulos, Atlas con 3, aquel histórico campeonato de Tecos, y los recientes logros de Tapatío, Tepatitlán y Leones Negros en la división de plata.
Jalisco no sólo juega al futbol: lo respira, lo inventa y lo hereda. No en vano es la cuna de campeones, forjadora de ídolos y tumba de gigantes. Aquí, donde la pelota nunca deja de rodar, el fútbol no es solo un deporte: es identidad.
OV