“Son cuatro décadas dedicadas a este maravilloso arte, que han valido la pena, aunque ha sido un camino con espinas pero también con muchas rosas”, reflexión Magdalena Solórzano, directora de la compañía Por Amor al Arte, que celebra 40 años con la puesta en escena de Sueño de una noche de verano de William Shakespeare.
A pesar de que confiesa que el teatro independiente es “complicado”, considera que la compañía ha trabajado “para montar las obras que nos gustan, siempre en equipo. “Aquí todos la hacemos de todo, y es la forma de continuar haciendo lo que es nuestra pasión, pero puedo decir que ha valido la pena llegar a niños, jóvenes y adultos a través del teatro. Ha sido muy satisfactorio”.

Sueño de una noche de verano será representada en el Claustro Románico del Instituto Cultural Helénico el 16, 23 y 30 de agosto, así como los sábados de septiembre, a las 12:00 horas.
La directora asegura que es una obra que nos puede internar en un mundo mágico: “Que puede ayudar a tener esperanza de que la magia existe y nos ayuda; que seres superiores nos cuidan y ayudan a arreglar nuestras vidas. Sueño de una noche de verano es una comedia escrita alrededor de 1595. Representa los eventos que suceden alrededor del matrimonio de Teseo, duque de Atenas, con Hipólita, reina de las amazonas. Incluyen las aventuras de cuatro amantes atenienses y un grupo de seis actores aficionados que son controlados por las hadas que habitan en el bosque”.

Bosque mágico
En esta puesta en escena hay personajes fantásticos y reales que se funden una noche para presentar una comedia de enredos llena de pasión, travesuras y magia. En la historia se entremezclan duendes, hadas y reyes de dos mundos, confabulados para ayudar a los hombres a encontrar el amor.
“Extraemos de la obra de Shakespeare, con todo respeto, la esencia de lo que nosotros pensamos que él quería mostrarnos. Nuestra misión como directora y actores es crear un bosque dentro de una noche mágica con hadas, duendes, trasgos y la luna de testigo en este bosque mágico en donde por igual se encuentran personajes de alta alcurnia, pertenecientes a la realeza, así como cualquier mortal peleándose por amores”.
El elenco está compuesto por 14 actores en escena en una de las obras más populares y representadas en el mundo. “La verdad es que tener la fortuna de representar a un clásico como Shakespeare, a un inmortal con cerca o más de 500 años de vida en este mundo, es un privilegio. Hay que agregarle que nos hace ver que, con distintos trajes, peinados y lenguaje, seguimos tan humanos imperfectos como siempre”.
La directora concluye: “Además, es una obra con amor de sobra y el amor siempre será de lo más intensamente bello que existe en este mundo. También hay que tener presente lo que el mismo Shakespeare nos dice en Hamlet: ‘Hay más cosas en los cielos y en la tierra de lo que la imaginación pudiera soñar’”.
Sueño de una noche de verano se escenificará en El Claustro Románico del Instituto Cultural Helénico, ubicado en Av. Revolución 1500 en la Col. Guadalupe Inn.

hc