El presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, no quiso responder a las madres buscadoras que cerraron simbólicamente las instalaciones del Senado y le exigieron una disculpa por sus declaraciones, en donde aseguró que las desapariciones forzadas no existen o son pocas.
“No, porque cualquier cosa que yo les diga va a ser distorsionada, las invito a que lean el documento que aquí leí. Es como lo que pasó en el CIDE: digo que las desapariciones es una tragedia, es una herida abierta, que hay que atender el tema, y acto seguido un joven dice ‘tú dices que no hay desapariciones’, pues casi eso es lo que están diciendo los medios. Es una perversidad y un uso deleznable del sufrimiento del pueblo, un golpeteo hacia mi persona. Al documento me atengo”, apuntó.
Por la mañana, madres de distintos colectivos cerraron simbólicamente los accesos de la cámara alta y denunciaron que existe una falta de compromiso de los legisladores con los familiares de los desaparecidos.
Por algunos momentos hubo confrontación entre transeúntes y madres buscadoras que intentaban brincar las vallas de metal colocadas por el personal de resguardo del Senado, para evitar que los colectivos ingresaran a las instalaciones.

Presidenta de la Comisión de Gobernación salió a atender a madres buscadoras: Noroña
Más tarde, el legislador Gerardo Fernández Noroña informó que durante la clausura simbólica de las instalaciones por parte de madres buscadoras, la presidenta de la Comisión de Gobernación, Margarita Valdez, salió a atenderlas, pero no aceptaron dialogar, “y la mandaron adelantito del rancho del compañero presidente”.
En entrevista, el morenista fue cuestionado sobre el balance que le reportaron de la protesta, a lo que respondió:
"A ver, una persona que proteste es su derecho y más si es una persona que tiene un familiar desaparecido.
"Salió la presidenta de la Comisión de Gobernación, la senadora Margarita Valdez, a atenderlas y la mandaron adelantito del rancho del compañero presidente".
Mencionó que las madres buscadoras le dijeron a la senadora que “que no querían hablar nada, que venían a protestar, que no querían decirnos nada”.
Entonces, comentó: “nosotros respetamos su protesta”.
El senador señaló que se generaron condiciones para que las mujeres estuvieran en una calle, que no tuvieran presión de los propios transeúntes “y tan, tan, y terminaron su protesta y se fueron. Pero sí se buscó recibirlas y no quisieron”.
Al final el personal de limpieza del Senado se encargó de limpiar las pintas e imágenes de sus desaparecidos que fueron colocadas en la calle de Madrid.
