Como todos los días, la señora Flor Esthela Ramos estaba sentada con sus familiares al exterior de su vivienda, en San Nicolás, cuando repentinamente explotó un transformador y una pieza le cayó en la cabeza.
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Los hechos se registraron el pasado 31 de mayo en el cruce de las calles Sinaloa y Lucero, en la colonia Fomerrey 11.
Tras el golpe, la mujer, de 59 años, fue trasladada a un hospital.
Los vecinos reportaron la situación a la Comisión Federal de Electricidad, sin embargo, no mostraron interés en el caso.
La señora Flor mencionó que continúa con malestares derivados del golpe que recibió de un tubo de aproximadamente 10 centímetros.
La afectada aseguró que su principal interés es que cuadrillas acudan a revisar el poste para descartar cualquier otro riesgo y que se hagan cargo de los gastos hospitalarios.
La señora Flor espera que tras hacer público su caso, la Comisión Federal de Electricidad tenga un acercamiento.
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