Será en los próximos días cuando el precio del jitomate disminuya considerablemente derivado de la alta producción y la imposición arancelaria del 17 por ciento, que entró en vigor el pasado 14 de julio,a las exportaciones hacia Estados Unidos . El jitomate de invernadero en la central de abastos de Toluca podría rondar entre 5 y 6 pesos el kilo, mientras que en los tianguis y recauderías de barrio estaría en 10 pesos o más.
“En la entidad hay mucha producción, los productores del norte del país buscarán bajarla a los estados del centro en lugar de llevarla a Estados Unidos, por ende, el precio bajará. Esto se suma a que el producto ya está sembrado y no se puede desperdiciar, así como a que nadie sabía lo de los aranceles y nadie defendió al sector de las medidas del presidente Donald Trump”, refirió Javier Reyes Escamilla, presidente de la Unión Ganadera Centro-Norte del Estado de México.
Venta y comercio
Para evitar más pérdidas en el comercio, algunos productores están “kileando”, es decir, han ido a ofrecer su jitomate directamente a las recaudarías y los mercados de la región para conseguir un mejor precio que en la central de abasto.
El jitomate de primera oscila en 11 pesos al mayoreo y podría bajar hasta 7 pesos, salido del invernadero. Actualmente al Valle de Toluca, dijo, llega jitomate de primera y segunda calidad, aunque el jitomate Cherry, que es muy caro, por ejemplo, llega de tercera sin empaquetar o etiquetar. A Estados Unidos se va casi toda la producción de municipios como Ixtlahuaca y Jocotitlán, por la calidad que manejan.
“Se producen en invernaderos muy grandes de cristal, una parte importante se va de manera directa y otra con intermediarios; el precio promedio en Estados Unidos es de 60 pesos el kilo. En la entidad el jitomate de primera, el denominado saladet, oscila en 11 pesos el kilo, mientras el cherry está más caro y se vende por gramaje” indicó.
Mercado nacional
Ciudad de México y Cancún son de los principales mercados en el país por la demanda de los turistas de origen norteamericano, europeo y asiático en los distintos restaurantes, quienes lo pagan muy bien.
En el Estado de México otros municipios productores de jitomate en invernadero son San Felipe del Progreso, Donato Guerra, Villa de Allende, San José del Rincón, San Bartolo Morelos y Atlacomulco, y la zona sur la mayoría lo hace a cielo abierto. A nivel nacional los estados punta de lanza son Sonora y Sinaloa, aunque hay otros como Guanajuato, que le han invertido mucho a la tecnificación
“Aunque no lo parezca hay mucha diferencia entre el jitomate de invernadero y el que se produce a cielo abierto. El de invernadero es más bonito, más rico, se vende en taras negras y es un poco más caro, mientras el otro se vende en huacal de madera, al de invernadero se meten abejorros para que los polinicen”.
De acuerdo con el Censo Agropecuario de 2022, en el Estado de México se produjeron alrededor de 28 mil 977 toneladas de jitomate rojo a cielo abierto en mil 225 hectáreas de superficie, ubicándose en el sexto lugar de los principales cultivos anuales, mientras que en los que refiere a la agricultura protegida o en invernadero se ubicó en primer lugar con 193 mil 291 toneladas al año, que representan 87 por ciento de la producción total que asciende a 22 mil 268 toneladas, en mil 465.2 hectáreas.