Mientras que el Infonavit dio a conocer el alcance en Nuevo León del programa federal Vivienda para el Bienestar, de la presidenta Claudia Sheinbaum, alcaldes metropolitanos pidieron que antes de construir nuevos hogares primero se regularicen los miles de inmuebles que están en abandono.
Al concluir la Mesa de Coordinación Metropolitana, los ediles de Salinas Victoria y Cadereyta señalaron que esas casas se han vuelto un punto conflictivo de inseguridad y drogadicción en sus municipios.
“Tenemos que atenderlo desde la raíz, porque en esos lugares se genera violencia y tenemos que abatir esos índices. Los vecinos nos reportan constantemente lo que sucede en esa unidad de multifamiliares, no podemos volver a eso. En Salinas solo aprobamos casa unifamiliar y estamos cerrando casas para que no se metan a vandalizar”, explicó Raúl Cantú, edil de ese municipio.
Carlos Rodríguez, alcalde de Cadereyta, dijo que: “Estamos de acuerdo con el programa de vivienda social que tiene la Presidenta, pero los alcaldes coincidimos en que antes de dar paso a construir nuevos hogares, primero tenemos que atender la problemática de casas emproblemadas que tenemos; en Cadereyta es común”.
Salinas Victoria refirió tener cuatro mil casas abandonadas, al igual que Cadereyta, mientras que Apodaca reportó cinco mil y García hasta 11 mil.
César Garza, alcalde de Apodaca, indicó por su parte que crear más vivienda en el municipio implica alejarse de la ciudad, donde la calidad de vida del derechohabiente no mejoraría.
“En Apodaca tenemos el problema que el área hacia donde se puede construir no es o no tiene la calidad de vida que merecen los ciudadanos, los estamos alejando más de los servicios, de las carreteras, del transporte. No es razonable construir más vivienda sin antes ocupar las más de cinco mil casas que Apodaca tiene en abandono”, señaló Garza.
Ayer, Octavio Romero, director del Infonavit, y Edna Elena Vega, de la Sedatu, presentaron en la Mesa de Coordinación Metropolitana el plan federal para construir un millón 200 viviendas, de las cuales 30 mil se edificarían en Nuevo León.