Un chofer repartidor de comida fue amenazado a balazos en el pueblo mágico de Coatepec, Veracruz, tras supuestamente agredir a un perro.
Los hechos se registraron en la privada Cafetales, Edificios Cerritos del Fraccionamiento Hacienda los Cafetales o fraccionamiento Casas GEO, como se le conoce, cuando el trabajador fue agredido a balazos por una persona que defendió a su perro.

Trabajador atacó a perro tras morderlo
Testigos narraron que el repartidor había llegado a surtir una tienda cuando un perro lo mordió, por lo que para defenderse, el trabajador pateó al animal y le lanzó una piedra.
El dueño del animal salió de su domicilio y le disparó varias veces con la intención de intimidar al empleado, quien salió corriendo hacia la camioneta.
Tras las detonaciones, el dueño del perro, identificado como Arturo ‘N’, se encerró en su vivienda, pero elementos de la Policía Municipal de Coatepec lograron detenerlo luego de que el trabajador fuera a buscarlos para denunciar al agresor.
El trabajador fue acompañado por los policías para interponer la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz contra el hombre que le disparó y que por suerte no logró herirlo.
¿Qué es la justicia por mano propia?
La Real Academia Española considera a los linchamientos como acciones que consisten en ejecutar, sin proceso, a un sospechoso o a un reo tumultuariamente (acción en la que participan más de tres individuos).
De acuerdo con un artículo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) publicado en 2002, el linchamiento es un fenómeno que se ha multiplicado en los últimos años, sin embargo, su apogeo comenzó entre los años 1995 y 1996 cuando se rescataron a 26 personas de ser linchadas, mientras que se reportaron 21 muertes a causa de la justicia propia.
En el artículo 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos se establece que “ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma, ni ejercer violencia para reclamar su derecho".
Esto considerando que la ley en México es únicamente aplicable por el Estado, con el fin de evitar lo anteriormente referido.
La manera en la que se castiga la justicia propia en realidad tiene que ver con la gravedad de las acciones, por lo que cada delito que se suscite durante un linchamiento está tipificado por la ley, ya sea como homicidio, tentativa de homicidio o el delito por incidir en lesiones.
Y sus penas o castigos están determinados en el Código Penal Federal o en su defecto en los Códigos de cada estado.
RM