Unas horas después de haber sido recluido en un penal del Estado de México, Alejandro “N”, llamado en redes sociales como Lord Pádel , fue liberado debido a una suspensión que un juez federal le había concedido con antelación para que no se ejecutara una orden de aprehensión en su contra.
La orden en cuestión había sido girada por un juez mexiquense luego de que la Fiscalía General de Justicia (FGJ) del Estado de México presentó cargos en contra de Alejandro por una agresión que le propinó a un instructor de pádel en un centro deportivo de Atizapán el 19 de julio.

Lord Pádel: en libertad, más no inocente
MILENIO verificó los registros judiciales y consultó con abogados expertos en temas penales para conocer qué significa el otorgamiento de dicha suspensión y qué no.
De entrada, todos coinciden en que la suspensión dictada dentro de un juicio de amparo no significa, bajo circunstancia alguna, una exoneración ni es sinónimo de impunidad. El proceso en contra de Alejandro ‘N’ y el resto de implicados, con independencia de si están o no detenidos, debe seguir su curso.
A continuación, se detallan los puntos clave en torno a estas suspensiones dictadas dentro del juicio de amparo 1363/2025.
La doble suspensión
Alejandro “N”, a través de sus abogados, presentó desde el 6 de agosto una demanda de juicio de amparo en la cual argumentó que sus derechos constitucionales habían sido violados, entre otras cosas.
Esto porque no se le permitió el acceso previo a una carpeta de investigación en su contra, y derivado de ello se giró una orden de arresto,
Un día después el asunto fue turnado al Juzgado Decimocuarto de Distrito del Estado de México quien admitió la demanda y programó para el 18 de septiembre la audiencia, en la cual se determina si la orden de aprehensión fue girada de manera correcta o no.
Mientras eso ocurre y de forma paralela, el juez concedió una suspensión provisional para que dicha orden no fuera ejecutada y con ello preservar la materia del amparo. Todo ello previo pago de 20 mil pesos como garantía.
Luego, tras confirmarse que la orden de aprehensión existía, el 18 de agosto el juez federal concedió la suspensión definitiva en contra de dicha orden, que permanecerá vigente hasta que se resuelva de fondo el asunto.
¿Por qué se concedieron las suspensiones?
Eduardo Amerena Minvielle, abogado y jurista experto en diversas ramas del Derecho, entre ellas la constitucional y penal, explicó que una orden de aprehensión es un mandamiento judicial que debe ser excepcional, pues representa un acto privativo de la libertad de una persona que aún no ha sido juzgada.
“Por ello siempre que se pida una suspensión de este tipo de acto, el juez federal va a conceder si es que el acto existe para luego revisar el asunto. Y ya dependiendo del tipo de delito son los efectos que tendría la suspensión. Pero basta que exista la orden para que una suspensión definitiva proceda”, indicó en entrevista.
El ex fiscal y abogado penalista Epigmenio Mendieta subrayó que los efectos de una suspensión de este tipo en un juicio de amparo son “mantener las cosas en el Estado en que se encuentre” antes de que se lleve a cabo el acto de autoridad reclamado.
Por ello, sí Lord Pádel contaba con una suspensión vigente antes de su detención, debía ser puesto en libertad.
Los tres especialistas coincidieron en que no ven irregularidad alguna en que dichas suspensiones se hayan concedido.
El proceso penal sigue, la orden se revisa
Gabriel Regino, abogado penalista y ex subsecretario de seguridad de la Ciudad de México, aseguró que los efectos de la suspensión implican que Alejandro 'N' no puede ser detenido, pero eso no significa que su proceso penal no pueda seguir adelante en el juzgado del fuero común a cargo del asunto.
Mendieta agregó que el juicio de amparo que dio pie a la orden solo está enfocado a verificar si la orden de aprehensión fue girada de manera correcta. No se enfoca en los hechos por el cual está siendo acusado.
“Con la suspensión dictada lo que sigue es verificar que la orden de aprehensión cuenta con todos los requisitos que establece la constitución y de esa manera calificar si está justificado o no el acto de molestia”, indicó Mendieta.
La resolución sobre si la orden de aprehensión o no estuvo bien sustentada es un proceso federal que está a cargo de juzgado Decimocuarto de distrito. En tanto las acusaciones en contra de Alejandro ‘N’ por el cargo de homicidio en grado de tentativa están a cargo de la jueza de control local, Paulina Peña.
Ni exoneración ni impunidad
Los tres especialistas aclararon que la suspensión dictada sobre la orden de aprehensión no puede ni debe entenderse como una exoneración para el procesado, ni como un sinónimo de impunidad, pues no afecta el desarrollo del caso.
Es decir, el implicado debe enfrentar un proceso que, si se comprueban los delitos, culminará en una sentencia.
“Cuando se da una suspensión se calienta mucho el ambiente. El problema es que las personas confunden prisión preventiva con justicia. Y esto no es así. Este señor tendrá que seguir su procedimiento penal”, indicó Amerena.
“Una suspensión definitiva no significa impunidad, significa que la libertad personal de la persona queda a cargo del juez de amparo, pero el implicado, en este caso este señor, está obligado a comparecer al proceso”, agregó Mendieta.
¿Por qué su esposa e hijo se quedaron presos?
Karla Alejandra ‘N’ y Germán ‘N’, esposa e hijo de Lord Pádel, permanecen en prisión preventiva debido a que ellos no contaban con una suspensión provisional ni definitiva que impidiera su detención.
Gabriel Regino explicó que Alejandro ‘N’ podría haber optado por meter a sus familiares en el mismo juicio de amparo que él promovió, pero no lo hizo. En consecuencia, los beneficios de la suspensión que obtuvo no pueden hacerse extensivos.
Mendieta explicó que a esto se le conoce como principio de relatividad de las sentencias.
“El amparo se ocupa única y exclusivamente de quien lo solicitó. Podrían haber estado todos en el mismo, pero no fue así”, indicó.
RM