Luego de que un juez de control determinara vincular a proceso y mantener encerrado en el reclusorio Norte al ex procurador Jesús Murillo Karam, ahora la Fiscalía General de la República (FGR) apunta la investigación en el caso Ayotzinapa a un punto clave en la narrativa de la llamada “verdad histórica”: el basurero de Cocula.
Antes de concluir la audiencia de vinculación a proceso, los agentes del Ministerio Público de la Federación solicitaron al juez Marco Antonio Fuerte Tapia seis meses como plazo para el cierre de la investigación.
El fiscal Arturo Pascual Soto explicó al juzgador que requerían este tiempo para recabar entrevistas de personas que estuvieron en el basurero de Cocula, obtener las bitácoras del helicóptero que estuvo en ese lugar, así como analizar los videos con que se cuentan de este tiradero en el que, de acuerdo con la “verdad histórica”, fueron incinerados los normalistas de Ayotzinapa.
Otros actos de investigación consistirán, abundó el fiscal, llamadas telefónicas que se realizaron y llegaron a la oficina del entonces procurador Murillo Karam en las que fueran sus oficinas en Paseo de la Reforma.
También, la FGR buscará conseguir documentación original de la Secretaría de Marina sobre estos hechos.
La defensa de Murillo Karam consideró “excesivo” este tiempo y dijo que tres meses serían suficientes, lo cual validó el juez.
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